No hizo falta que ningún periodista le preguntara a Juan Carlos Mandiá por su abrupta salida del Hércules de hace dos años. El propio entrenador gallego sabe que su marcha levantó ampollas y que aún hay en Alicante muchos seguidores recelosos por su regreso. Por este motivo, Mandiá pidió perdón a quienes molestara aquella decisión y reclamó a la masa social blanquiazul que valore globalmente su aportación al Hércules en las dos etapas en las que ha ejercido de entrenador.

"Sé que aquella decisión (su salida) pudo molestar a mucha gente y les pido perdón. Para mí fue muy desagradable saber que molesté a gente porque siempre he deseado lo mejor para el Hércules", afirmó el nuevo preparador blanquiazul, quien agregó: "Pero también quiero que la afición vea globalmente lo que hemos hecho en las dos etapas anteriores. En la primera conseguimos el ascenso a Segunda pese a coger a un Hércules que estaba por detrás del otro equipo de la ciudad (Alicante). Y en la segunda conseguimos 78 puntos y dejamos firmados a jugadores como Peña y Juanra que fueron clave en el ascenso".

Mandiá estuvo arropado en su presentación por el director deportivo Sergio Fernández, su gran valedor, así como por los dirigentes Valentín Botella, Juan José Huerga, Perfecto Palacio y Carlos Parodi.

El nuevo técnico insistió en repetidas ocasiones que es "clave" hacerle ver a los aficionados del Hércules que el año venidero será "complicado". "La situación es difícil y la masa social debe darse cuenta para que no se lleven una impresión irreal del proyecto. Tenemos que hacer un equipo prácticamente nuevo y con unas limitaciones económicas importantes", resaltó Mandiá antes de matizar: "Pero eso no quiere decir que no nos dejemos el alma en confeccionar un Hércules competitivo y que se vacíe en los partidos".

Mandiá resaltó que ve "mucha energía positiva y ganas de hacer club" en las personas que ahora están al frente del Hércules (en referencia a Perfecto Palacio y Sergio) y confirmó que apostará por la cantera. "El fútbol base es fundamental y sé que es una de las líneas maestras de este nuevo proyecto. Nosotros no somos sospechosos de no trabajar con los chavales y vamos a seguir haciéndolo", aseguró el gallego, quien ha quedado vinculado al Hércules para el próximo año, aunque con opción a otro más si clasifica al equipo entre los diez primeros.

El entrenador no quiso pronunciarse sobre los seis jugadores a los que Sergio ya ha comunicado que deben buscarse equipo (Portillo, Pamarot, Velthuizen, Sarr, Rufete y Del Olmo) aunque sí dejó claro que Abel Aguilar y Tiago Gomes son intransferibles, al igual que Juanra y Paco Peña. "Abel y Tiago pueden dar un nivel altísimo. El primero creo que está por debajo del rendimiento que puede dar y si conseguimos que se queden los dos ya tendríamos una estructura importante en el centro del campo", señaló.

Mandiá descartó que el objetivo del próximo curso sea el ascenso, ya que las limitaciones económicas son notables y confió en que la afición se vincule con su equipo como ya sucediera en su última etapa. "El año de los 78 puntos conseguimos una identificación preciosa entre el equipo y la afición, y nuestro reto es volver a conseguirlo", dijo el técnico.

Por último, el presidente blanquiazul Valentín Botella cerró la presentación de Mandiá con una alocución breve pero sincera. "Hace dos años me enfadé muchísimo con él (el entrenador) porque se iba, pero ahora estoy encantado de que haya vuelto con Sergio. Le deseo lo mejor y estoy seguro de que nos espera un año bonito", concluyó Botella.