Esta es la historia de dos jóvenes que, por intervención del destino, viajan juntos a bordo de una caravana Mercedes 303. El destino de Jule es Portugal, país en el que vive su novio, mientras que Jan se dirige a España a conocer a su padre biológico. Ambos parecen ser muy distintos entre sí, aunque conforme vayan cruzando países, se darán cuenta de que tienen más cosas en común de las que imaginaban. El viaje servirá a este inesperado dúo para conocer quiénes son realmente y, quizá, para entablar algo más que una duradera amistad.

Se trata el quinto largometraje del director alemán Hans Weingartner, que formó parte del Festival de Valladolid, y que adquirió un considerable prestigio entre la crítica por dos títiulos a tener en cuenta: Los Edukadores y Un juego de inteligencia.

El origen de la película se encuentra en la cinta de Richard Linklater Antes del amanecer de 1994, donde el director Hans Weingartner trabajó como asistente de producción. Cuando leyó el guion original quedó tan fascinado que decidió que una vez en su vida haría una película similar. Más de 20 años después, Weingartner presenta su propia visión de un romance incipiente en el extranjero. «Elegí escribir un argumento romántico -declaró el director- porque quería descubrir algo sobre el amor, investiga el amor y las relaciones. Es la base de nuestra felicidad, la decisión más importante de nuestras vidas, pero realmente no sabemos nada al respecto y, a menudo, tomamos decisiones equivocadas porque nos aferramos a viejos ideales románticos que están lejos de la realidad».