Unas 300 personas se concentraron ayer a las puertas del colegio Altamira de El Campello para mostrar su apoyo a cuatro monitores de este cento que han sido declarados inocentes del delito de abuso a menores del que fueron acusados. La iniciativa reunió a familiares, amigos y vecinos de la localidad que quisieron dejar patente su respaldo a los cuatro jóvenes. La concentración se inició a las 16.30 horas justo frente al centro en el que trabajaban los monitores cuando fueron denunciados. Una prima de dos de los jóvenes leyó un escrito en el que lamentó el daño que se les ha hecho, tanto moral como personal porque todos se han quedado sin trabajo. El personal concentrado mostró dos pancartas en las que aludían a la inocencia de los monitores y a que en ningún momento dudaron de esta condición durante el tiempo en el que duró todo el proceso.