Sindicatos y patronal desbloquean el convenio del turrón

Principio de acuerdo en el sector del turrón. Sindicatos y patronal alcanzaron ayer en Madrid un preacuerdo para renovar el convenio del sector, que incluye un aumento salarial del 0,3% para 2013 y 2014, la no congelación de la antigüedad y una cláusula para que en caso de que cuando se negocie el próximo convenio no haya acuerdo, se prorroguen las condiciones económicas actuales. Este pacto, tras muchas horas de negociación y tras ceder ambas partes, fue celebrado ayer tanto por representanes sindicales como patronales.

La Federación Agroalimentaria de CC OO y la Federación de Industrias y Trabajadores Agrícolas de UGT llegaron ayer a este acuerdo con representantes de la Asociación Nacional de Turrones y Mazapanes (Tuma) y la Asociación de Fabricantes de Turrón, Derivados y Chocolates de la Comunidad Valenciana (TDC), para renovar el convenio colectivo estatal de las Industrias de Turrones y Mazapanes, aunque ambos sindicatos tendrán que llevar el pacto ante sus asambleas para que sea ratificado por los trabajadores.

El preacuerdo afecta a un colectivo de 5.100 personas en el conjunto del país con un alto porcentaje de trabajadores fijos discontinuos. De ellos, 1.500 se encuentran en Xixona, que vivía con gran preocupación la falta de entendimiento.

Desde CC OO se explicó ayer que la culminación de las negociaciones, después de dos años de bloqueo, ha sido posible por las iniciativas sindicales como asambleas, recogidas de firmas, concentraciones, iniciativas institucionales en los municipios donde se ubica la producción... puestas en marcha por este sindicato, que "ha movilizado y concienciado a los trabajadores de las empresas del sector en las zonas donde se concentran las industrias del turrón y mazapán".

La vigencia del convenio será desde el 1 de enero de 2011 hasta el 31 de diciembre de 2014, y los puntos más importantes del preacuerdo alcanzado ayer se centran un incremento salarial del 0,3% para 2013 sobre las tablas salariales vigentes con carácter retroactivo desde el 1 de enero del presente año, y el mismo 0,3% para 2014, que se aplicará sobre las tablas del 2013. En cambio horas extras y nocturnidad sí que quedan congeladas.

El pago de la cantidad acordada para 2013 se efectuará a los 30 días siguientes a la firma del convenio y los atrasos correspondientes desde el 1 de enero de 2013 se harán efectivos dentro de los dos meses siguientes, por lo que la aplicación del convenio será a la firma del mismo, que se prevé para la primera quincena de mayo.

Los valores económicos vigentes del convenio en 2014, último año del convenio serán de aplicación hasta que no sean sustituidos por lo pactado en un nuevo convenio. Con ello se consigue una garantía de futuro de los conceptos económicos del convenio evitando un vacío importante de no alcanzarse un acuerdo en la negociación del convenio a partir de 31 de diciembre de 2014. Este riesgo mantenía en vilo hasta ahora a miles de empleados del sector, que temían verse abocados a regirse por el convenio general y sufrir recortes de hasta el 50% en el sueldo.

Con respecto a la antigüedad, se ha establecido en el preacuerdo establecer un tope de ocho trienios con el vencimiento este año y a partir de 2014 se establecerá un tabla progresiva del número de días de pago para tener derecho a un nuevo trienio, adecuándose la proporción del fijo discontinuo a los días de pago de este colectivo. Este nuevo tratamiento significa seguir manteniendo la antigüedad aunque con limitaciones. La fórmula de aplicación debe concretarse en la redacción definitiva del texto articulado del convenio.

Desde la patronal Federico Moncunill, secretario general de TDC, destacó ayer la responsabilidad con que han actuado ambas partes, que han cedido en sus posturas "para llegar a un preacuerdo y no tirar por la borda lo conseguido durante 20 años. Con el nuevo convenio logramos un escenario de seguridad en lugar de incertidumbre", alabando el esfuerzo de los trabajadores con la contención salarial.