Luz verde de la Conselleria de Cultura al derribo de la Casa Geralda, aunque con tirón de orejas para el Ayuntamiento de Xixona por no tener el Catálogo de Protecciones al que obliga la Ley desde 1998, y donde podría haber figurado el inmueble. El Consistorio recibió el pasado martes las conclusiones del expediente sobre la valoración de esta mansión señorial del siglo XIX, abierto por la Conselleria a raíz de un escrito presentado por una asociación en defensa del patrimonio.

La Generalitat no pone trabas al derribo del inmueble, ya que deja la decisión en manos de la Corporación, que proyecta en la zona dos pistas de pádel tras la demolición, aunque hace una serie de consideraciones. Cultura considera que podría gozar de protección, pero su valor es limitado al no conservarse su medio rural original y presentar un avanzado estado de deterioro. Y afirma que es potestad del Ayuntamiento su posible protección.

Lo que sí que lamenta es que el municipio aún no tenga un Catálogo de Protecciones donde se recojan los inmuebles relevantes para garantizar su conservación, por lo que da un año al Ayuntamiento para que lo redacte. En este sentido, el equipo de gobierno asegura que lleva un año trabajando en ello.

El escrito explica que los técnicos de Cultura realizaron en septiembre un reconocimiento ocular del inmueble, y junto con los estudios del Consistorio se ha emitido el informe, fechado el 4 de diciembre y firmado por la jefa del Servicio de Patrimonio Cultural.

Arquitectura rural

En el mismo explica que «la Casa Geralda corresponde a la tipología de arquitectura rural de carácter señorial de mediados del siglo XIX. La edificación estuvo enclavada originariamente en una finca agrícola, sin embargo, hoy en día dicho entorno ha sido urbanizado, encontrándose el edificio en suelo urbano, calificado como equipamiento deportivo. En su entorno inmediato se ubican otras instalaciones municipales» como el colegio Sagrada Familia, el polideportivo y el campo de fútbol.

Señala que «el edificio administrativamente carece de protección legal de tutela, ya que el municipio carece en la actualidad del Catálogo Urbanístico de Bienes Protegidos en su PGOU de 1987, a excepción del integrante del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) del Casco Antiguo. También carece de declaración patrimonial expresa, no encontrándose en el Inventario de Patrimonio de la Comunidad».

Y destaca que «el Ayuntamiento no ha procedido a la elaboración del Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos, a pesar de la obligación de la Ley 4/1998 de Patrimonio Cultural Valenciano, que establece un plazo de año desde su entrada en vigor para la elaboración de los mismos, lo que hubiera permitido establecer aquellos elementos dignos de protección».

Al margen de esto, Cultura afirma que «se ha observado, en coincidencia con los informes aportados por la Corporación (en los que se certifica su ruina) que el edificio se encuentra en mal estado general tanto interior como a nivel de acabados exteriores. Parte de la cubierta y algunos forjados se han derrumbado. Y la mayor parte de la carpintería exterior e interior está totalmente inservible». La Conselleria también apunta a que «del examen de la documentación y del análisis realizado en la inspección, se aprecia que el edificio puede tener interés de carácter local, fundamentalmente por su tipología y conformación volumétrica, sin embargo se encuentra limitado al no conservarse el medio rural para el que fue concebido».

El departamento autonómico estima que «la tipología y volumetría de la Casa Geralda posiblemente le hubieran hecho merecedora de estar incluida en el catálogo del municipio, de haber sido este redactado, al igual que otros edificios y elementos existentes en el término municipal, que carecen en la actualidad de protección legal».

Requerimiento

Por todo ello se requiere al Ayuntamiento a que en el plazo de un año tenga redactado el Catálogo, para recoger en el mismo los inmuebles que aspiren a ser Bien de Relevancia Local. Sin embargo, en cuanto a esta mansión señorial levantada a principios del siglo XIX afirma que «la opción de una posible inclusión en el citado Catálogo de la Casa Geralda, debe constituir, en principio, una iniciativa y consideración de índole municipal».

Por su parte, desde el Ayuntamiento señalaron que llevan tiempo preparando el pliego técnico de condiciones para sacar a licitación en 2018 el contrato para redactar el catálogo, y que ya se ha terminado del Estudio de Paisaje, un documento previo necesario para este inventario y que se va a exponer al público. También destacaron que son muchos los municipios que al igual que Xixona aún carecen de catálogo, aunque en el caso de la localidad turronera al menos se dispone del Plan Especial del Casco Antiguo, que ya protege los más relevantes.

Con esta resolución de la Conselleria, unida a la del Síndic de Greuges, que también daba la razón al Consistorio frente a la reclamación de frenar el derribo por parte del Círculo de Defensa del Patrimonio y Seixona Ancestral, se espera que la demolición se realice en los próximos meses. El Ayuntamiento había aparcado la adjudicación de l derribo, para la que ya se tienen las ofertas, hasta que se resolvieran los dos expedientes. Por ello ahora se va a reactivar la licitación para llevar a cabo a principios de 2018 la demolición del inmueble y la construcción de las dos pistas de pádel.