La falta de acuerdo para trasladar el Pacte del Botànic a Xixona se cobra la primera víctima. El secretario de Organización de Compromís y portavoz de la agrupación local, Juli Martínez, ha presentado su renuncia a estos cargos que ostentaba desde 2015 y cesa su colaboración con el colectivo, al discrepar de la política de confrontación que, a su juicio está llevando a cabo su partido con el PSOE. Lamenta además las formas con las que se ha respondido a la «tímida pero cortés propuesta de diálogo del PSOE», a la que se contestó con «un texto agresivo, prepotente, destructivo y de dudosa educación», mostrando su rechazo a la política de «venganza».

La candidata del PSOE, Isabel López, fue investida alcaldesa el sábado al ser la formación más votada, ya que no recabó el apoyo ni de Compromís ni de Cs, por lo que se trata de un gobierno en minoría. Y en un comunicado hecho público en su blog, Martínez, que iba de número 11 en la lista electoral, recuerda que en los últimos años se ha hecho un gran trabajo. Lograron entrar en el Ayuntamiento en 2015 y realizaron «una oposición ingente, propositiva y constructiva, que pocas veces fue aceptada por el PSOE», y ahora, han mejorado resultados alcanzado los dos ediles.

«El buen resultado de 2019 comportaba una lectura alentadora, pero perversa. Entre PSOE y Compromís teníamos la mayoría absoluta. El PSOE no nos había tratado nada bien, pero a mi parecer había llegado la hora de la magnanimidad, del diálogo fino y preciso, de la negociación dura pero leal. He aquí donde la perversidad del resultado cogió forma. Las personas que protagonizaron el descalabro del partido entre 2003 y 2011 entendieron, no sé por cuál razón, que también ellos eran padres de la victoria. Entendieron, de hecho, que ellos eran los únicos padres de la victoria», señala Martínez.

Y esta política de confrontación considera que ha impedido un pacto de gobierno o al menos de investidura, ya que «esas personas, después de haber estado desaparecidas desde 2013 hasta mayo de 2019, volvieron y, a la tímida pero cortés propuesta de diálogo planteada por el PSOE, decidieron responder con un texto agresivo, prepotente, destructivo y de dudosa educación. Si simplemente se hubiera rechazado la oferta de diálogo, yo esa decisión la habría aceptado, por mucho que no la compartiera. Son las maneras, es el hecho de entender la política como una venganza», por lo que ha decidido dejar la formación.

Réplica de Arques

Por su parte el líder de la formación, Joan Arques, explicó ayer que la renuncia de Martínez «la respeto pero no la comparto. Se ha precipitado en su decisión. En cuanto a si es por culpa de no haber pactado para el pleno de investidura, es cierto, pero nosotros mantenemos la puerta abierta al PSOE. Entendemos que el PSOE no respetó el Pacte del Botànic por la forma como se procedía a realizar las negociaciones. Por tanto era muy difícil llegar a un pacto para el sábado, solo teníamos dos días, ya que tardaron seis días en contestarnos. La propuesta que había encima de la mesa era inviable porque no especificaba nada». Y agregó que «espero de Juli Martínez regrese al colectivo».