Un sanitario de urgencias de San Vicente del Raspeig contestó con un "¡Viva España!" a una mujer que le habló en valenciano tras pedir una ambulancia, según denuncia Plataforma per la Llengua.

Los hechos tuvieron lugar en el mes de junio, cuando la madre de Irene, la mujer, avisó al servicio de urgencias médicas del 112. Irene se acercó a los sanitarios para informarles de que habían sido requeridos por su madre. En ese momento, el sanitario contestó: "¿Qué dice? Hábleme en castellano".

La mujer continuó en valenciano y, según denuncia la Plataforma, el hombre no ofreció ningún tipo de atención al paciente, sino que acabó dirigiéndose a ella con un "¡Viva España, viva el rey ,viva el orden y la ley!

Desde la Plataforma consideran que el sanitario manifestó "prejuicios lingüísticos impropios de un trabajador del sector público de la Generalitat". Asimismo, ha recomendado al trabajador que "realice un curso de valenciano" y ha instado a que conselleria informe al sanitario sobre los derechos lingüísticos. Además, ha apuntado la necesidad de que se elabore un protocolo para actuar ante estas situaciones.

También han recordado desde la organización las palabras de la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, quien declaró que "entre una buena acción sanitaria y exigir el título de valenciano, hay que garantizar la salud del ciudadano". En este contexto, la Plataforma per la Llengua ha señalado el "asegurar la competencia lingüística como única forma de garantizar la salud de los ciudadanos".

Otros casos de discriminación lingüística

"Este nuevo caso de discriminación se suma a la larga lista de casos de valencianofobia que la Plataforma per la Llengua del País Valencià ha denunciado", ha asegurado la organización.

En concreto, ha recordado otros sucesos en los que los derechos lingüísticos se vieron afectados en el ámbito de la sanidad pública. Así es el caso de Beniparrell, donde a un paciente que preguntó por las analíticas de su padre en valenciano se le negó la asistencia.

Pero no solo la sanidad pública ha sido escenario de estos casos de "valencianofobia". Concretamente, la Policía Nacional aplicó la 'Ley Mordaza' a un repartidor por dirigirse en valenciano. En la denuncia constaba que el Jafet Pinedo estaba "hablando en valenciano aunque los agentes le piden que hable en castellano". En este caso, el 'rider' denunció a los dos policías por detención indebida y denuncia falsa.

Una legalidad que protege el valenciano

La organización ha puesto sobre la mesa el respaldo legal con el que cuentan sus reivindicaciones. Por una parte, recuerdan que "el artículo 9 de l'Estatut asume que los valencianos tienen derecho a dirigirse a la Administración en cualquiera de los dos idiomas oficiales". Además, apunta que en el artículo 6 "la Generalitat garantizará el uso normal y oficial de las dos lenguas".