La fisonomía de San Vicente del Raspeig va a cambiar en los próximos años gracias al desarrollo de los planes urbanísticos que aún están pendientes de desarrollar. Uno de los que ya se ha puesto en marcha es el Plan de Reforma Interior (PRI) Montoyos, un proyecto iniciado hace 15 años y que después de estar paralizado más de un lustro se reactivó por la promotora el año pasado.
Esta actuación de desarrollo pretende una expansión por el sur del municipio. El plan afecta a un suelto que se encuentra junto a los juzgados de San Vicente, la Universidad, el futuro pabellón y está próximo al complejo deportivo del velódromo.
Como paso previo a iniciar las obras, la empresa urbanizadora está ultimando la demolición de las viviendas afectadas por este plan que se habían mantenido tras las primeras demoliciones que tuvieron lugar en 2009, cuando la empresa pidió una ocupación anticipada del suelo que obligó al desalojo de cuatro familias que pagaban un alquiler antiguo, a quienes ha estado pagando una renta y en algún caso una residencia de ancianos.
Uno de los aspectos importantes que se llevan a cabo a la vez que se derriban las viviendas es el acuerdo al que la mercantil está llegando con los residentes. Según indican fuentes técnicas municipales, actualmente son menos de una decena las familias afectadas y la mercantil está llegando a una solución negociada con ellas, según señalan desde el Ayuntamiento. Además, desde la administración local enfatizan que a la vez que las viviendas son abandonadas se derriban, para evitar que se pueda producir una ocupación irregular de los inmuebles desalojados.
Los realojos y acuerdos con los residentes afectados es una de las particularidades del plan urbanístico. Fuentes técnicas municipales explican que no todas las familias tienen el título de propiedad de las viviendas que ocupaban, pero se les ha reconocido el derecho de uso. Señalan que algunas ocupaban las viviendas de forma «alegal, pero no ilegal» y ahora se está buscando una solución negociada con cada una de ellas.
Con las soluciones a las que Urbedesa llegue con todos los vecinos afectados por la reactivación del plan urbanístico, el urbanizador va a presentar al Ayuntamiento su plan de realojos que el Consistorio tiene que estudiar y valorar para aprobarlo o modificarlo en caso de que sea necesario.
Las demoliciones están condicionadas en algunos casos por la presencia de los puntos de luz. La zona está atravesada por una línea eléctrica que tiene que desviarse para poder desarrollar la urbanización. La mercantil ha contactado con Iberdrola para tramitar los permisos. Algunas de las viviendas derribadas lo están parcialmente, puesto que mantienen paredes donde se encuentran estos cuadros eléctricos que se tienen que desviar.
Un gran parque
El Plan Montoyos acogerá el que será el futuro instituto de San Vicente del Raspeig, así como un desarrollo urbanístico de 479 viviendas, de las cuales 120 son de protección oficial y contará con un gran parque así como la prolongación de la avenida del País Valencià. El alcalde de San Vicente, Jesús Villar, es optimista y considera que 2021 será el del inicio de las obras de urbanización del Plan Montoyos.
El plan se reactivó finalmente el año pasado tras estar en suspenso desde 2013. Se presentó en 2005 y la mercantil esgrimió la crisis económica para su paralización que se prolongó hasta 2019.
Urbanismo quiere que las empresas diseñen el nuevo instituto de la zona
El Consistorio aboga por que quien se presente al concurso proponga un proyecto en los 6.500 metros cuadrados
El instituto número seis que durante los últimos años ha estado reclamando la comunidad educativa para descongestionar los centros de San Vicente del Raspeig se ubicará en la zona del plan Montoyos. El centro se construirá dentro del Plan Edificant de la Conselleria de Educación que aprobó esta nueva construcción.
El suelo educativo previsto en el Plan Montoyos preveía en un principio la construcción de un colegio de educación primaria, pero la reclamación de la necesidad de un nuevo instituto motivó este cambio.
El futuro instituto número 6 de San Vicente contará con un espacio de en torno a 6.500 metros cuadrados que el consistorio quiere que esté optimizado y valorado técnicamente de la mejor forma posible.
El alcalde, Jesús Villar, explica que el primer paso para la construcción del nuevo instituto pasa por presentar el plano de implantación. Un proyecto de obra que la Conselleria de Educación ha solicitado al Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig previo a la construcción del centro. Se trata del proyecto inicial del edificio donde se van a indicar las necesidades de ese centro. El primer edil recalca que el Ayuntamiento quiere que sean las empresas que opten a la construcción del instituto «las que digan qué quieren hacer con esos 6.500 metros cuadrados de los que disponen».
El sector del Plan de Reforma Interior de Montoyos tiene una superficie de casi 60.000 metros cuadrados, de los que 18.400 son de titularidad privada y los dos tercios restantes pública.
