Un suplicio el que están viviendo durante los últimos días los vecinos de una urbanización del PAU 2, muy cerca de Maristas. A las molestias originadas por el coronavirus y el confinamiento, se han sumado unos nuevos invitados: las gaviotas. La vida ha vuelto a cambiar inesperadamente para muchos vecinos que tienen que salir con mucho cuidado a la terraza de sus casas tratando de evitar los ataques de las gaviotas, cada vez en mayor número y con importantes dosis de agresividad.
«No podemos salir a las terrazas ya que desde hace días hay una bandada de gaviotas que se ve que han anidado en las urbanizaciones de al lado y no paran de hacer vuelos rasantes que asustan mucho», afirma Carlos, uno de los vecinos del PAU 2 que está sufriendo diariamente los vuelos de estas descaradas aves.
Aparte de la incomodidad de verse continuamente amenazados por la presencia de las gaviotas, se suma el molesto ruido y sobre todo la suciedad que generan a todas horas.
La causa de la visita diaria de estas aves a las casas de los vecinos parece estar en que en las urbanizaciones de enfrente han anidado las gaviotas durante las últimas semanas. «Hemos visto hasta polluelos, con lo que tenemos claro que tenemos muy cerca nidos. Urge una solución porque no podemos vivir con este problema», señala Carlos. El asunto ha sido notificado a los administradores tanto de la finca donde están los nidos como las de los vecinos que más están sufriendo estas visitas inesperadas.
