El grupo municipal Popular en el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig ha arremetido contra el primer edil, Jesús Villar, a quien acusan de "pasividad" al no implementar las medidas de seguridad para el acceso al Ayuntamiento. “Hace más de un mes que el alcalde, a cargo de la concejalía de Recursos Humanos, tras desistir de la misma su compañero de equipo José Manuel Ferrándiz, se comprometió a la contratación de seguridad, a través de un contrato menor, con la Junta de Personal que representa a los trabajadores municipales. Contrato que a día de hoy no se ha hecho efectivo” afirma el portavoz Popular, Óscar Lillo. "Esperamos no tener que lamentar finalmente alguna situación no deseada por la pasividad a la hora de darle solución a este tema, que afecta a la integridad y tranquilidad del personal municipal a la hora de desempeñar sus puestos de trabajo”, añade.

Es una solicitud que el Partido Popular reivindica desde hace tiempo y de forma más insistente después de producirse incidentes en las áreas de Servicios Sociales hace más de un año “y también ante la labor que desempeñan los auxiliares de servicios que son la primera línea de atención a los ciudadanos. Vecinos que se encuentra con la imposibilidad de les atiendan o poder realizar trámites para los que no disponen de citas, etc.” señala Lillo. 

Agresiones

“Cuando ocurrieron las primeras agresiones el año pasado, el concejal de Seguridad, Ferrándiz, ya dijo estar viendo la forma de redistribuir efectivos para dotar de más seguridad al Ayuntamiento. Hace unos plenos volvimos preguntar y no habían llegado a ninguna conclusión, y en el pleno de abril nos dijo con el control de acceso únicamente se pueden detectar navajas y otros objetos, pero no impiden agresiones. Sin embargo poco después el alcalde, contradice y deja en entre dicho todos los argumentos de su propio concejal de Seguridad, al realizar una nueva promesa de contratar seguridad. Este tipo de incoherencias y sucesivos cambios de criterios  se están “normalizando” en la forma de gestionar del actual equipo de gobierno (PSOE-EU)”.

Lillo añade que “ha sido solicitado por los sindicatos de trabajadores, pero la realidad es que las soluciones no llegan. Por ello, esperamos que se haga efectivo ya este contrato, pues para otros contratos menores se dan mucha más prisa” y concluye “ que se dejen ya de promesas y palabras vacías, que el "buenismo" del alcalde, la pasividad o el dejar pasar el tiempo, no sirve para solucionar los problemas municipales, ni los de nuestros vecinos”.