Para ser efectiva, la concienciación debe empezar siempre en edades tempranas. Sólo así podremos llegar a cambiar un mundo demasiado acostumbrado a contaminar y a otros comportamientos inadmisibles, en todos los terrenos.

Eso lo entendieron a la perfección los alumnos del instituto Enric Valor de El Campello, que participaron en la sección «Educacción» del Festival de Cine de Alicante, celebrado el pasado mes de junio. Sus trabajos compitieron con más de medio centenar de cortometrajes remitidos desde toda España… y ganaron.

El vídeo, titulado «El viaje de Taponet», consiguió el Premio Nacional Fundación SEUR (valorado en 500 euros y una tablet para los protagonistas), y el reconocimiento unánime del jurado, que valoró cómo los alumnos Gabriela Domínguez y Tomás García, de primer curso de ESO (12-13 años), supieron tocar conciencias y transmitir en apenas seis minutos la importancia de reciclar y, sobre todo, no tirar a la vía pública residuos urbanos.

El vídeo de estos dos alumnos expone el recorrido que hace una botella, con su tapón, desde que se tira a la calle hasta que llega al mar, lo que conlleva un daño irreparable al ecosistema y la muerte de especies marinas.

Pero Gabriela y Tomás no fueron los únicos premiados en el Festival. Sus compañeros Ismael Muñoz (curso 13-14 años) y Carlos Pericacho (16-17 años) consiguieron los premios al mejor actor secundario y mejor guión, respectivamente. Todo un triunfo para el instituto y para la docente que se encargó de incentivarlos para participar, Rosabel Torregrosa Lillo, una catedrática de música que transmite valores a sus alumnos y sabe sacar lo mejor de ellos mismos.

El Festival de Cine de Alicante, consolidado ya en el calendario nacional, decidió hace años implicar a los educandos en la realización de cortometrajes en dos categorías: los temas sociales que más afectan a los adolescentes (violencia de género, homofobia o bullying), y recogida selectiva y solidaria de residuos.

Bajo la supervisión de la docente, ellos se encargan del guión, de la banda sonora y de la imagen. Los trabajos audiovisuales son de un nivel increíble para esas edades, y los hay que incluyen sus propias bandas sonoras.

El nivel de participación en el Instituto Enric Valor ha sido este año tan alto que la propia Rosabel Torregrosa se vio obligada a hacer una selección previa para elegir a los mejores.

«Ha sido muy gratificante», explica la docente, «y no me equivoco si digo que algunos de mis alumnos tienen futuro en el mundo de las artes, bien sea en el cine, en el teatro o en cualquier otra disciplina, porque hay madera».