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La montaña de chatarra de San Vicente crece y Urbanismo anuncia que va a imponer multas

La mercantil presenta un recurso y advierte que su actividad es de comercio de chatarras y metales. Los vecinos advierten que la licencia que piden no se corresponde con su actividad

La montaña de residuos de la chatarrería está ubicada en zona industrial y frente a viviendas. Jose Navarro

La montaña de chatarra en la barriada de El Sagrat de San Vicente del Raspeig se ha hecho más grande. Y hay dos gigantescos montículos. Son los que acumula una empresa dedicada a la recogida de chatarra, que los desposita con la ayuda de grandes grúas. Los vecinos de la zona han denunciado las molestias que les genera esta actividad por el ruido y el polvo que provoca a diario; y advierten de que se trata de una actividad peligrosa porque hay una acumulación tal de objetos que hay piezas que caen a la vía pública.

El Ayuntamiento de San Vicente abrió en diciembre sendos expedientes por acumulación de vertidos con situación de riesgo para viandantes y vehículos en la vía pública tras un informe de la Policía Local, exigiendo por un lado la limpieza de la instalación; así como una corrección de los niveles de exceso de ruido que los agentes constantaron. En ninguno de los casos se ha producido ningún cambio. Desde el área de Urbanismo y Disciplina Urbanística que dirige el alcalde, el socialista Jesús Villar, anuncian que la empresa ha hecho caso omiso al decreto que exigía mantener el solar "libre de desechos y residuos y en las debidas condiciones de higiene, salubridad, seguridad y ornato público". Desde Disciplina Urbanística anuncian ahora que se va a pasar a una segunda fase, la de imponer multas coercitivas, que pueden llegar a los 600 euros.

A la vez, el expediente por exceso de ruido sigue abierto, puesto que no se ha corregido el exceso de contaminación acústica detectado. Y Urbanismo expone que sigue en marcha para exigir valores acordes a lo permitido. Desde la Policía Local se han hecho sonometrías que arrojaban niveles de contaminación acústica superiores a los exigidos.

Por su parte, la empresa que gestiona la chatarra no está conforme con la orden de ejecución del Ayuntamiento aludiendo que su actividad implica la acumulación de vertidos. Y ha presentado un recurso de reposición contra el decreto del alcalde que exige la limpieza del material acumulado. La mercantil advierte que explota en suelo industrial la actividad de comercio al por mayor de chatarra y metales. "La sociedad se dedica a la venta de chatarra y metales usados, con todos los permisos en regla, en un entorno cerrado, completamente vallado y acotado y ordenado por materiales y mercancías", exponen en sus alegaciones. Añaden que no acumulan desechos insalubres sino materiales y chatarra; y concluyen que están al corriente de sus obligaciones tributarias "estamos en el mercado, vendemos, somos eficientes y ordenados".

La explotación de los residuos niega que exista peligro para los viandantes y alegan que hay un vallado de dos metros. Y advierten de que la mercantil cuenta con licencia de venta de chatarra y metales "perfectamente ordenada, catalogada y distribuida para su comercialización como lleva haciendo desde 2017".

Sin embargo los vecinos no están deacuerdo con estas afirmaciones ya que han constatado en grabaciones que piezas de chatarra han caido a la vía pública. Y no consideran que las piezas estén ordenadas y catalogadas, ya que se arrojan en montones con gigantescas grúas que dejan caer los metales y objetos de diversa índole.

Los residentes afectados por la actividad están preocupados porque la mercantil ha pedido en el Ayuntamiento licencia de apertura de actividad de almacenamiento y valorización de residuos no peligrosos y almacén de residuos peligrosos. Y la empresa ha presentado el estudio de impacto ambiental emitido por la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica. Los vecinos han presentado un informe en el que advierten "que la actividad que se desarrolla en la industria no tiene que ver con la licencia solicitada". Indican que la mercantil aduce "que realizará la actividad en el interior de una nave cerrada y en el exterior se realizará el acopio. Y que la única maquinaria a utilizar será una carretilla elevadoras". Y añaden, "no es así, toda la actividad se hace fuera, con una prensa compactadora y en la denuncia no se han podido tener en cuenta las vibraciones", porque la policía no tiene medidores.

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