Al menos 25 niños de la Escuela de Verano de Sant Joan han resultado afectados por una infección cutánea menor, según han denunciado padres y han confirmado fuentes municipales. Este brote de impétigo en el colegio Cristo de la Paz, al parecer empezó la pasada semana y este martes eran ya al menos 25 los afectados. En esta escuela organizada por la concejalía de Educación hay unos 250 niños, aunque la gran mayoría de afectados tiene entre 4 y 5 años.

Así, el Ayuntamiento ha dado traslado de esta situación a Salud Pública, ya que el Consistorio no tiene competencias en ese ámbito, y aguarda instrucciones para actuar, por si hay que clausurar la escuela o tomar alguna otra medida

Los niños han aparecido con ronchas en la piel y ha generado una gran preocupación en los progenitores. La voz de alarma ha saltado este martes mediante la denuncia de una madre en redes sociales donde indicaba que su hijo tenía el pie “en carne viva” y que varios niños se encontraban igual. Y el Ayuntamiento ha informado que hay al menos 25 afectados. Se trata de una infección bacteriana de la piel llamada impétigo que se contagia con mucha facilidad en la cara, el cuello, las manos y los pies.

Algunas fuentes apuntan a que el origen podría estar en el agua de los hinchables, algo que se descarta desde el Consistorio, aunque debe ser Salud Pública quien lo determine.

El alcalde de Sant Joan, Santiago Román (Cs), ha confirmado este miércoles a este medio que una vez se enteró de lo sucedido, se puso en contacto durante la misma mañana del martes con la técnico de Sanidad del Ayuntamiento, la cual le indicó que unos 25 niños estaban contagiados y que se habían trasladado los datos al departamento de Salud Pública de la Conselleria de Sanidad para conocer el alcance y establecer el protocolo a seguir.

Por su parte la concejal de Educación, Esther Donate (PSOE), ha explicado que el Ayuntamiento se ha coordinado con Salud Pública, que ha pedido un pequeño informe que ya le ha sido remitido, y que ahora va a proceder a realizar una criba para averiguar de esos 25 niños cuántos tienen impétigo, así como dar instrucciones el Ayuntamiento para actuar. 

Donate ha señalado que en cuanto al origen, descartan que sea en los hinchables, y que es una enfermedad que se transmite “piel con piel”, y que la mayoría de niños afectados son de 4 y 5 años. Las monitoras detectaron la pasada semana varios casos, que fue identificado por la enfermera escolar, recomendando que llevaran a los niños al pediatra y estuvieras varios días sin acudir a la escuela. Y esta semana, al aumentar el número de afectados, se ha decidido dar parte a Sanidad, pese a tratarse de una infección menor de no obligada comunicación

Al parecer, al menos tres niños no acudieron a la escuela de verano de Educación por tener fiebre y posteriormente les salieron las erupciones.

El impétigo es una infección bacteriana de la piel superficial, más frecuente en la infancia, que está causada por dos bacterias principalmente: Streptococcus pyogenes y Staphylococcus aureus. Suele producirse por pequeñas heridas de la piel que permiten a las bacterias introducirse en ella. Afecta con más frecuencia a las zonas descubiertas, por eso es muy típico en localizaciones como alrededor de la nariz o de la boca. Es más frecuente en niños de 2 a 5 años y en épocas de calor.

Fuentes médicas consultadas señalan que el tratamiento de esta enfermedad se suele hacer a través de antibióticos tópicos en forma de crema. Aunque no es grave sí que requiere que los niños no vayan a clase hasta que las costras de las heridas se caigan para cortar así la transmisión.

Desde el Partido Popular, su portavoz, Javier Yebes, critica la tardanza con la que se ha actuado en este caso por parte de la concejalía. Cree Yebes que desde el primer momento en el que aparecieron los casos "se deberían haber retirado los hinchables, dado que esta enfermedad se contagia por el contacto". Asegura que en la mañana de este miércoles los juegos seguían instalados. También sostiene que hasta que Salud Pública no hubiera dado instrucciones "se deberían haber organizado las actividades de manera que hubiera el menor contacto posible desinfectando además el material".