El Campello desbroza el tramo final del río Seco-Montnegre para evitar inundaciones y prevenir plagas de mosquitos. Los trabajos de retirada del carrizo han comenzado este miércoles, para evitar obstrucciones para el flujo del agua que en caso de riadas puedan provocar daños, facilitar el acceso a la hora de realizar los tratamientos para el control de las poblaciones de mosquitos, y permitir el flujo del agua y evitar su estancamiento.

Las actuaciones cuentan con las autorizaciones de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), la Demarcación Provincial de Costas, la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, y el Servicio de Espacios Protegidos, departamentos con competencias en estos asuntos, según han informado este jueves desde el Consistorio.

El departamento de Medio Ambiente que dirige Rafa Galvañ (PP), señala que el clareo del carrizo permite mejorar el conjunto del ecosistema de esta zona húmeda. Los trabajos se realizan bajo el puente del FGV y el de la calle San Bartolomé, y desde el puente de FGV hasta la desembocadura.

Se está desbrozando el centro del cauce, dejando una pantalla de carrizo a ambos lados, y paralelamente se crean islas de carrizo en el centro del cauce.

En el tramo medio del río se actúa en el entorno del Camí Reial de La Vila-Ronda María Auxiliadora, 25 metros aguas arriba, y desde este paso hasta el puente de FGV, donde se dejará una zona sin desbrozar para favorecer la depuración de las aguas por parte del carrizo.

Hay que recordar que este año la Generalitat ha protegido el tramo final del río al incluirlo dentro del Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana. Abarca 25,46 hectáreas, entre el puente de la antigua N-332 y la desembocadura, y destaca por ser una rambla típica mediterránea, con una función importante de evacuación de caudales de avenida, que desde hace más de una década se ha convertido en un vergel por el caudal constante que proporciona la depuradora de Sant Joan.

Otra imagen de las tareas de desbroce

Del mismo modo esta zona ha sufrido este verano diversos vertidos de fecales por el deficiente sistema de alcantarillado y la acumulación de toallitas. Esto llevó a los vecinos de la zona a salir a la calle en julio para exigir el cese de esta contaminación. Centenares de personas se manifestaron para reclamar una solución definitiva a estos problemas. Además, los residentes hace años que vienen denunciando las plagas de mosquitos que sufren, y que atribuyen al río Seco, pese a las labores de fumigación que se realizan para prevenir su proliferación.

Así mismo, EU viene denunciando también en los últimos años la falta de un plan antirriadas, y reclamando el desbroce de barrancos y cauces antes de la llegada de la época de riesgo de la gota fría.