La seguridad privada vuelve a los servicios sociales de San Vicente para evitar agresiones

El servicio, que se desarrollará también en parques y eventos deportivos durante los 2 próximos años, pretende complementar y colaborar con la Policía, ante la falta actual de agentes

El vigilante de seguridad este miércoles en los servicios sociales, ante los ediles de Bienestar Social y Seguridad.

El vigilante de seguridad este miércoles en los servicios sociales, ante los ediles de Bienestar Social y Seguridad. / INFORMACIÓN

San Vicente del Raspeig vuelve a contar con seguridad privada en las dependencias municipales. Este miércoles ha entrado en funcionamiento el nuevo servicio para reforzar la vigilancia en espacios especialmente sensibles como los servicios sociales.

Esta vez, el Ayuntamiento da un paso más ya que no sólo ha previsto la presencia de vigilantes que eviten altercados y posibles agresiones en los servicios sociales. Ahora también hay presencia de vigilantes privados en los parques Lo Torrent y Adolfo Suárez y en otras dependencias municipales del barrio de Santa Isabel.

El nuevo contrato incluye también su presencia en eventos deportivos organizados por el Ayuntamiento. La presencia de vigilantes de seguridad en el Ayuntamiento se prestará durante 2 años por un importe de 260.012 euros con la posibilidad de que se prorrogue durante 2 años más.

Colaborar y complementar a la Policía

Desde el consistorio advierten de que se trata de un servicio de vigilancia privada para colaborar con la Policía Local y complementar sus labores en el control de situaciones conflictivas o actos vandálicos.

"Esta medida supone una alianza esencial con los agentes de la Policía Local para realizar tareas complementarias en el control y vigilancia en parques o actividades deportivas”, han expuesto de manifiesto en la mañana de este miércoles, el concejal de Seguridad, José Manuel Ferrándiz, la concejala de Bienestar Social, Isabel Candela, el oficial de la Policía Local, José Emilio Fernández Reyes, encargado de elaborar el pliego de condiciones y el responsable del contrato, el intendente Ximo Calpena que han acudido a la puesta en marcha del servicio.

Concejales y oficiales advierten de que este servicio es una alianza con la Policía Local para realizar tareas complementarias en el control y vigilancia en parques o actividades deportivas

En este sentido, el alcalde, Jesús Villar, explica que “se trata de un servicio transversal que va a cubrir las necesidades de diferentes departamentos, lo que dará solución a las demandas del personal, mejorando y ampliando significativamente la seguridad en servicios sociales”. 

El regidor municipal reconoce que "lo ideal sería poder cubrir estos emplazamientos con Policía Local, pero el número de agentes en la plantilla lo hace inviable, y pese a que se están realizando los procesos para cubrir las vacantes existentes, la imposibilidad de ampliar la plantilla para atender las necesidades reales de nuestro municipio, nos hace tener que contar con este tipo de servicio privado”, ha detallado Villar.

"Lo ideal sería poder cubrir estos emplazamientos con Policía Local, pero el número de agentes en la plantilla lo hace inviable"

Jesús Villar

— Alcalde de San Vicente

La presencia de vigilantes de seguridad no sólo disuade los posibles casos de conflicto, sino que también “supone una alianza esencial con los agentes de la Policía Local para realizar tareas complementarias en el control y vigilancia en parques o actividades deportivas”. De esta forma, las dependencias de Servicios Sociales contarán con un vigilante de nueve de la mañana a dos de la tarde, en el horario de atención al público. 

Combatir el vandalismo en los parques

El servicio va más allá del edificio consistorial, ya que también se implantará en el centro social Santa Isabel. En este caso, la vigilancia de lunes a jueves será de nueve a dos y los viernes desde las once hasta las dos de la tarde. Por su parte, los parques Lo Torrent y Adolfo Suárez, dos de los espacios públicos más relevantes de San Vicente del Raspeig, contarán con la presencia de un guardia jurado para fortalecer la vigilancia en horario vespertino y nocturno: de mayo a septiembre de seis de la tarde a doce de la noche y de octubre a abril, desde las seis de la tarde a las diez de la noche. La razón principal se debe a que desde el área de Parques y Jardines aseguran que es en ese periodo en el que aumentan los actos vandálicos que afectan a las infraestructuras y los servicios públicos disponibles en los parques.

Vigilancia de la piscina de verano

El contrato también contempla la vigilancia durante la temporada estival de la piscina de verano, una vez se finalicen las obras de ampliación y unión con la piscina cubierta. Unas labores que ha requerido la concejalía de Deportes para el control del recinto y el apoyo en la zona de control de acceso. De la misma manera, el servicio tendrá en cuenta aquellas pruebas deportivas que organice el Ayuntamiento y requieran el montaje de infraestructuras en la vía pública.

El dispositivo contará con seis vigilantes de seguridad sin armas, además de ocho miembros del personal de la empresa de seguridad, adscritos a este contrato, entre los que se incluyen un gerente, un jefe de servicios y un inspector.

El servicio se puso en marcha en 2021 durante 9 meses. Ello a raíz de altercados en los servicios sociales donde se llegaron a producir agresiones a trabajadores. El contrato finalizó en mayo pasado y el Ayuntamiento decidió ampliar a más dependencias el servicio que hoy se pone en funcionamiento.

Quienes no están de acuerdo con que sean vigilantes privados quienes realicen servicios en espacios públicos abiertos son los agentes. El sindicato mayoritario SPPLB ha advertido de que se están asumiendo tareas que corresponde a la Policía Local. Y de hecho, ya han anunciado que interpondrán una denuncia.