Adiós a la emblemática gasolinera de La Carrasqueta

La emblemática estación de servicio de La Carrasqueta es ya historia. Esta antigua gasolinera de Xixona, levantada en los años 60 del pasado siglo y que llevaba más de una década cerrada, ha sido derribada por motivos de seguridad. El Ayuntamiento había reclamado a los dueños que actuaran ante la peligrosidad que representaba el inmueble, situado a mitad de la ascensión en dirección Alcoy. Y hace unos días empezaron los trabajos de demolición, tanto de su estructura como la del restaurante que había al lado. Y los trabajos ya han finalizado. Solo quedan los cimientos.

La alcaldesa de Xixona, Isabel López, ha explicado que el Ayuntamiento venía exigiendo desde hacía años que la propiedad actuara para garantizar la seguridad de la zona, ya que sobre todo cuando había fuertes rachas de viento volaban algunas planchas. Pero el fallecimiento del dueño, las dificultades para localizar a los herederos y la existencia de acreedores ha complicado este tema durante años, insistiendo el Consistorio que se pusiera remedio a esta situación.

Así, la imagen de esta zona de gran valor medioambiental mejora si la presencia de esta estructura, que estaba completamente abandonada y había sido víctima también de actos vandálicos. "Un sitio más bonito y seguro", ha manifestado López, que ha destacado que se recupera este espacio natural.

El Ayuntamiento aprobó la instalación de esta gasolinera el 25 de febrero de 1965, y el complejo empezó su decadencia hace más de dos décadas con la puesta en marcha de la autovía A-7 entre Alicante y Alcoy por el interior. Esta nueva infraestructura evitaba tener que pasar por La Carrasqueta a los viajeros que se desplazaban entre estas dos localidades, o hacia València o Murcia, suponiendo un importante ahorro de tiempo en su trayecto. Y así el numero de usuarios de la CV-800 a su paso por el puerto se desplomó, al igual que los clientes de la gasolinera, aunque los fines de semana la gran afluencia de motocicletas a la ruta motera por antonomasia mantuvo un tiempo con vida la estación de servicio.

Estas motos siguen acudiendo en masa, lo que han llevado a que la Dirección General de Tráfico (DGT) haya declarado este tramo Ruta Ciclista Protegida, para tratar de reducir la elevada siniestralidad y las carreras que se registran, y que vienen denunciando los residentes desde hace décadas.

Esta iniciativa se puso en marcha el pasado marzo, y supone que los fines de semana y festivo la velocidad se limita de los 80 kilómetros por hora habituales a 70 km/h. La reducción está vigente de 9.00 a 14.00 horas en un tramo de 11 kilómetros, y además la Guardia Civil ha reforzado su presencia en esta zona de Xixona, una de las más peligrosas de España para los motoristas.