Dicen que la fe mueve montañas, aunque en este caso ha movilizado a cientos de vecinos de la localidad de Alcoy hasta la Font Roja para celebrar uno de los días grandes, la romería en honor a la patrona, la Virgen de los Lirios. Los más madrugadores se concentraban en la puerta del cementerio municipal a las siete de la mañana, enfrente del Polideportivo Francisco Laporta, para calentar el cuerpo con unos tragos de biri-biri y herberet. Allí les esperaban los autobuses de los que dispusieron todos aquellos que veían imposible llegar andando hasta el santuario. Otros con paciencia y buen ritmo subieron a pie el costoso y, en algunas ocasiones, empinado recorrido. No faltó la buena compañía. Familia, grupos de amigos, mascotas. En el equipaje de cada uno de ellos tampoco podía faltar la ilusión, la fe y la esperanza por llegar a la Font Roja después de todo el cansancio reflejado en las caras de muchos de ellos. El sol fue uno de los grandes compañeros de viaje e imprescindible del día, ya que gracias al buen tiempo la romería atrajo a más público del que suele acudir normalmente a este tradicional acto. Una vez alcanzada la meta, se podía percibir un ambiente de unión y convivencia entre todos los vecinos que descansaban bajo las carrascas de la Font Roja y paraban para tomarse el habitual «esmorçar». A las doce del mediodía tuvo lugar la misa en honor a la patrona, la Virgen de los Lirios que recibió los cánticos y el cariño de la multitudinaria presencia del público que arropó durante todo el día los actos que se celebraron en el paraje natural. Jóvenes, niños, mayores, todos se congregaron en el santuario de la Font Roja para ser espectadores de un acto especial en el que estuvo presente la devoción y alegría. Unos sentimientos que la presidenta de la Archicofradía, Marcela Martínez, compartió durante la mañana con gran emoción, ya que tras dieciséis años presidiendo este cargo ha decidido dejar la presidencia porque «se deben renovar y dar oportunidades a otras personas», según confesó.
Para ella fue muy importante el tiempo, pero sin duda alguna, quiso agradecer a todos los peregrinos la participación en la romería, ya que «sin ellos esto no sería posible» explicó Marcela. La presidenta resaltó que, a pesar de algún pequeño retraso en el itinerario, se cumplieron todos los actos previstos. Un año más, los alcoyanos participaron de forma espectacular en la romería que dejó momentos muy emotivos de encuentro entre todos los asistentes.
