Tras la Diana y el Concurso de Cabos de Escuadra, capitanes, integrantes de la Comisión de Fiestas, corporación municipal, festeros y vecinos en general se dirigieron al templo parroquial de la Virgen de la Misericordia. En una iglesia completamente abarrotada, Josep Miquel Francés, prior de la Basílica de Castellón y antiguo párroco de Camp de Mira fue el encargado de oficiar la Misa Mayor en honor a San Jorge.

En su omilía, el prelado se refirió a los últimos asesinatos cometidos por el Estado Islámico y a cómo la madre de dos de los fallecidos ofrecía perdón a los autores desde su casa de Egipto, en la cual, a través de la televisión, se podía ver una imagen de San Jorge colgada en la pared. Francés calificó por ello al patrón de Banyeres como el santo del «perdón, la paz, el amor y la concordia».

En el transcurso del oficio religioso se interpretó la Missa de Sant Jordi de Banyeres de Mariola, compuesta por Francisco José Molina Rubio.

Ya por la tarde, se celebró el Desfile Infantil de Cabos y Escuadras, antes de que a las siete diese comienzo la Procesión General de San Jorge, con una elevada participación.

Fue el broche a una jornada emotiva y repleta de sentimientos, que dará paso hoy a un día totalmente distinto, en el que el protagonismo recaerá en el estruendo de los arcabuces con las batallas entre Moros y Cristianos.