El “Programa de mejora de la Condición Física Post Covid-19”, impulsado por el Ayuntamiento de Alcoy, empezará la próxima semana. Siete personas participarán en el plan de erhabilitación que se desarrollará en el complejo deportivo municipal Eduardo Latorre.
Los profesionales ya han entrevistado a los usuarios con el objetivo de evaluar las capacidades físicas y respiratorias, así como los hábitos deportivos y composición corporal de cada usuarios del programa. Esta evaluación, pretende individualizar la carga de los entrenamientos del programa lo máximo posible y, de esta manera, aumentar paulatinamente su capacidad física y respiratoria.
Las evaluaciones fueron realizadas por los trabajadores del complejo deportivo municipal Eduardo Latorre, coordinadas por el Departamento de Salud de Alcoy. Carla Lloret como fisioterapeuta, Javier Aura y Saúl Bernabeu como Técnicos de Actividad Física y Andrea Ferrándiz también como técnico de Actividad Física y Nutricionista.
Participarán en el programa 7 personas, 4 mujeres y 3 hombres que han padecido la enfermedad y se dividirán en dos grupos. Un grupo con una afectación severa y otro grupo con una afectación moderada. Estas personas tal y como informamos han sido remitidas por el Hospital Comarcal Verge dels Lliris.
La actividad se realizará en las instalaciones municipales en horarios definidos de mañana, durante 3 sesiones semanales y un periodo de 8 semanas, repitiendo sesiones en su domicilio y trabajando de manera específica la fisioterapia respiratoria.
“Este es un programa gratuito para la ciudadanía de nuestro municipio que tiene como objetivo contribuir a mejorar la calidad de vida de estos pacientes que han superado el largo periodo de hospitalización por la Covid y las secuelas que les ha provocado. Esperamos ayudar a las personas para que se recuperen de la mejor manera posible”, ha explicado el concejal de Deportes y Salud Pública, Miguel Juan Reig.
Hay que resaltar que los fisioterapeutas están jugado un papel fundamental en la recuperación de las personas que han padecido COVID-19 severo. Esta enfermedad no acaba con el alta médica pues muchas son las secuelas que aparecen en los pacientes. El síndrome post-UCI engloba un deterioro global: a nivel cognitivo, físico y emocional. Hay un daño respiratorio y una pérdida muy marcada de masa muscular con gran debilidad generalizada. También hay afectación a nivel funcional, de metabolismo como las polineuropatías y los trastornos circulatorios, ya que la propia inmovilidad favorece la aparición de edemas o trombosis venosas.
Para ello el ejercicio terapéutico y los ejercicios respiratorios elaborados en función de las necesidades de cada paciente, son muy importantes en la recuperación de los pacientes que han pasado la COVID-19, ya que ayuda a mejorar el estado físico, disminuye la disnea, incrementa la fuerza muscular, mejora el equilibrio y la coordinación, reduce el estrés y mejora el humor y el pensamiento, aumenta la confianza y mejora la energía.
Las actividades de este programa multidisciplinar se centrarán en la recuperación de la condición física, la terapia respiratoria y en los efectos psicológicos o emocionales.
