La incidencia de coronavirus en el departamento de Salud de Alcoy llegó a sobrepasar los 3.000 casos por 100.000 habitantes a finales de enero, una cifra que situó el área entre las más castigadas por el virus en la tercera ola. Si bien los datos fueron «alarmantes», como señalan responsables sanitarios, ahora es el departamento con menor incidencia de la Comunidad, con 13 casos por 100.000 habitantes.
¿Qué ha pasado para que se produzca un cambio tan radical? El gerente del área de Salud de Alcoy, Enrique Barbeito, asegura que en el caso de Alcoy, la ciudad más poblada del departamento, y también en Castalla, «se aplicó el cierre perimetral a petición del Ayuntamiento antes que en otros municipios», una medida que posteriormente extendió la Conselleria de Sanidad. El responsable sanitario considera fundamentales las restricciones que se han venido aplicando hasta ahora, muchas de las cuales se han suavizado en las últimas semanas, pero que todavía se mantienen, como «limitar el número de personas que pueden reunirse en terrazas o los grupos de convivientes en domicilios».
Pese a ello, Barbeito insiste en que las medidas para frenar la propagación del virus «son iguales para todos», por lo que cree que la virulencia de la tercera ola de covid «quizá asustó a la gente». La directora de Salud Pública en Alcoy, Clara Pastor, coincide con el gerente en que «las dos primeras olas pasaron de puntillas por el departamento» y, sin embargo, durante la tercera «en todas las familias había algún caso cercano, es como que la gente se topó con la realidad. Le vio las orejas al lobo», y ello «provocó que la ciudadanía hiciese más caso a las indicaciones sanitarias».
Pastor recuerda que «en enero estuvimos muy mal, de hecho casi 9.000 de los más de 13.000 casos de coronavirus registrados en el departamento de Salud de Alcoy desde el inicio de la pandemia corresponden a la tercera ola». No obstante, la directora de Salud Pública insiste en que «la gente se sigue reuniendo, aunque yo creo que con mayor precaución».
«En enero veníamos de enlazar el puente de diciembre, Navidades y Reyes», unas fechas en las que «no se limitaron las reuniones» y que después provocó una incidencia elevadísima del virus y el Hospital Virgen de los Lirios de Alcoy al borde del colapso. En estos momentos, según los datos facilitados por Enrique Barbeito, el centro hospitalario no tiene ningún paciente con coronavirus ni en planta ni en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) desde el pasado 9 de abril. Además, salvo los cinco positivos notificados este lunes, anteayer y ayer «nos mantenemos en cero casos».
En el caso de Alcoy, el concejal de Seguridad, Raül Llopis, explica que «en la ciudad se ha detectado algún botellón aislado, pero nada que ver con lo que está sucediendo en otros municipios» de la provincia. El edil también recalca que las fuerzas de seguridad han estado, y están, «realizando controles en diferentes zonas y establecimientos para controlar que se cumplan los aforos permitidos y el resto de medidas de seguridad». El edil insiste en que «ni en los peores momentos de la tercera ola hubo descontrol en este sentido».
Llopis, al igual que los responsables sanitarios, considera que la «gravedad» de la situación vivida a principios de año «asustó a la población», y ello ha conllevado «un mayor cumplimiento de las normas».
«En Semana Santa la gente ha quedado, pero no como en Navidad, y eso se ha notado» de forma positiva, situando al departamento de Alcoy como el de menor incidencia de coronavirus de la Comunidad Valenciana en menos de tres meses. Tanto es así que mientras a nivel nacional se habla de cuarta ola, «aquí no estamos notando, por ahora, un incremento de casos», señala Clara Pastor.
En cualquier caso, el gerente del área insiste en que «no hay que bajar la guardia», porque el exceso de confianza puede «volver a situarnos en la casilla de salida».
