La Mancomunitat de l'Alcoià i el Comtat ha iniciado el proceso administrativo para la puesta en marcha del centro de día comarcal para personas dependientes, promovido por la asociación Projecte Somriures y que se ubicará en Benimarfull. La institución ha acordado por unanimidad hacerse cargo de la iniciativa, al solicitar a la Generalitat acogerse al Plan Convivint y, por lo tanto, asumir las competencias para que la instalación sociosanitaria sea una realidad en el menor plazo posible.
La entidad supramunicipal ya había mostrado el pasado mes de noviembre su disposición a materializar este proyecto, atendiendo la petición realizada por Projecte Somriures. La Generalitat incluyó desde un primer momento en el Plan Convivint el centro de día comarcal para personas dependientes en Benimarfull, pero en principio iba a ser el Ayuntamiento de esta localidad de El Comtat el que asumiera la realización del proyecto y de todos los trámites administrativos, además de ejecutar las obras, con los fondos que le asignara el gobierno autonómico. Sin embargo, la limitada capacidad económica y de recursos humanos del municipio, de apenas 400 habitantes y con un personal técnico mínimo, suponía una complicación, por lo que la asociación impulsora instó al Consistorio a inhibirse en favor de la Mancomunitat, y a esta a recoger ese guante.
Las instalaciones, como ha venido publicando este periódico, se plantean en un principio para atender a personas dependientes de todo el ámbito comarcal de l'Alcoià-Foia de Castalla y El Comtat, poniendo un foco especial en los menores. La elección de Benimarfull como sede responde a la existencia en esta localidad de un edificio municipal construido hace más de una década como centro social polivalente, pero que no ha tenido apenas uso alguno. El Ayuntamiento ha mostrado un apoyo absoluto a la iniciativa desde el primer momento. El inmueble tiene 746 metros cuadrados de superficie construida, de los cuales 628 son de superficie útil.
Fuentes de la Mancomunitat explican a este periódico que ahora el Consistorio de Benimarfull debe aprobar la cesión del edificio, y después la organización supramunicipal hará la redacción del proyecto básico. Todo este proceso puede llevar un tiempo, pero inciden en que "lo más importante ya está iniciado", y que también se da otra cuestión fundamental como es el acuerdo entre todas las partes implicadas.
En este último aspecto ha venido también haciendo hincapié en todo momento el presidente de Projecte Somriures, Hipòlit Agulló, quien ha mostrado su satisfacción por este nuevo paso. La asociación apunta, además, que "estaremos supervisando y tutorizando de alguna manera todo este proceso, con el permiso de las tres administraciones públicas implicadas, para este proyecto se haga con los criterios que desde nuestros inicios han marcado nuestro rumbo". En este sentido, el colectivo alude a la necesidad de contar con "recursos comarcales y públicos que mejoren la calidad de vida de nuestros hijos e hijas". Y dentro de esto, aluden al uso del edificio de Benimarfull como un "aprovechamiento de recursos ya existentes", que permitirán hacer de este inmueble "un hogar" para las personas usuarias, y un centro de "convivencia, terapias y oportunidades para todos y todas".
