El cementerio de Alcoy amplía su capacidad con 216 nuevas sepulturas

Los trabajos de mantenimiento en el camposanto permiten ganar más de 600 espacios de enterramiento en cuatro años, entre los de nueva construcción y los que estaban en desuso y que se han recuperado

Trabajos de restauración de nichos en el cementerio municipal de Alcoy.

Trabajos de restauración de nichos en el cementerio municipal de Alcoy. / Juani Ruz

El cementerio municipal de Sant Antoni Abat de Alcoy ha ampliado su capacidad en 216 sepulturas, resultantes de las obras de reconstrucción del primero de los 14 bloques de enterramientos del camposanto que están siendo objeto de rehabilitación integral. Estos trabajos, que se encuentran ya en su fase final, han permitido crear 168 nuevos nichos y 48 columbarios, según explican fuentes municipales. El objetivo es que a medida que continúen las obras se vayan ganando más espacios para dar sepultura a fallecidos.

Las mismas fuentes señalan que en los últimos cuatro años se han obtenido 600 plazas de enterramiento gracias a las diferentes actuaciones de rehabilitación llevadas a cabo, entre las 300 que se han creado nuevas y otras tantas que se encontraban vacías, y cuya titularidad ha ido recuperando el Ayuntamiento tras negociar con las familias que las tenían en propiedad. En este sentido, la obra que se está ejecutando ahora ha estado precedida de un trabajo administrativo de casi dos años, necesario para contactar con las familias, recuperar la concesión de las sepulturas y acordar la reubicación de los restos.

Bloque de nichos ya rehabilitados.

Bloque de nichos ya rehabilitados. / JUANI RUZ

Una vez concluya la rehabilitación de los 14 bloques de enterramientos cuya mejora se ha iniciado, se espera contar con unas 2.200 nuevas sepulturas. Estas medidas permitirán dar una respuesta más eficiente a un hecho, el de que al ser Alcoy una ciudad notablemente envejecida, el volumen de defunciones es elevado. En 2019, antes de la pandemia de coronavirus, fallecieron en el municipio 571 personas, y en años anteriores la cifra se situó por encima de las 650, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

En esta sucesiva rehabilitación de las sepulturas del cementerio de Sant Antoni Abat también se pretende recuperar las que se encuentran vacías en las llamadas "catacumbas". Estas singulares galerías subterráneas de nichos suponen una característica muy particular de este camposanto, además de uno de sus atractivos más curiosos en el plano turístico. La idea es poder volver a realizar enterramientos en esta zona, aunque para ello, recuerdan desde el Ayuntamiento, será necesaria la construcción de un ascensor, imprescindible para cumplir con las normas de seguridad y de accesibilidad. 

El concejal de Urbanismo, Jordi Martínez, señala que el Ayuntamiento seguirá incidiendo en estas dos líneas, "dando nuevo uso a sepulturas vacías y rehabilitando aquellos bloques en peor estado". Además, comenta, "llevaremos a cabo otras acciones de mantenimiento y ampliación con el objetivo de disponer de un cementerio con capacidad y con las mejores condiciones".

Un espacio visitable y con fallecidos ilustres

El cementerio de Sant Antoni Abat de Alcoy, aparte de ser el lugar de enterramiento de los vecinos de la ciudad que van falleciendo y tener por ello un uso práctico y de servicio público, es también uno de los puntos de interés turístico de la ciudad. Las catacumbas o enterramientos subterráneos son uno de ellos, junto con los panteones y las sepulturas de personas que fueron ilustres en vida por algún motivo. Entre ellos, el cantante y compositor Camilo Sesto, cuyo futuro mausoleo ya tiene el espacio delimitado y en poco tiempo será una realidad. Otros alcoyanos ilustres de renombre que descansan en este cementerio son la escritora Isabel-Clara Simó y el cantautor y actor Ovidi Montllor.