LEl Altet -600.000 pasajeros al año- se ha convertido en el segundo aeropuerto de España tras Palma de Mallorca para Air Berlin y el sector turístico confía en que esta coyuntura pueda amortiguar los efectos de la crisis, de momento, centrada en el mercado nacional, pero que también ha afectado este invierno al británico por la depreciación de la libra, circunstancia que puede afectar directamente a los resultados de la próxima temporada alta alta.

Los vuelos directos de Alicante a Alemania y las campañas de promoción de las empresas han fortalecido la imagen de la Costa Blanca en uno de los "motores" económicos de la UE, algo que pueden confirmar ya hoteles de Calpe, Benidorm, Guardamar, Alfaz del Pi, Altea y El Campello.

Air Berlin es la aerolínea que más rápidamente ha crecido después de la reunificación alemana. Fue fundada en el año 1978 y, desde entonces, está en continua expansión. Con unos 27,9 millones de pasajeros transportados en 2007, Air Berlin reafirmó su posición como segunda aerolínea más grande en el transporte aéreo dentro de Alemania, y es la cuarta mayor de Europa con alrededor de 8.000 empleados.

Tras haber adquirido LTU y su participación en la aerolínea suiza Belair, y la austriaca NIKI de Niki Lauda, los aviones del grupo Air Berlin vuelan por todo el mundo. La red de trayectos abarca vuelos domésticos en Alemania y a las principales metrópolis internacionales, como son, por ejemplo: Miami, Londres, Paris, Moscú, Zurich y Viena.

a Conselleria de Turismo ha aprobado un plan especial de promoción en el mercado alemán que absorberá el 30% de los recursos económicos del plan de márketing diseñado para paliar los efectos de la crisis económica que ha comenzado a salpicar con fuerza a un sector que genera 300.000 empleos directos en la Comunidad Valenciana y representa el 14% del Producto Interior Bruto. La situación de muchos complejos hoteleros es más que delicada y ha tenido repercursión directa en la reducción de personal durante la temporada baja, pero tanto los empresarios como la Administración confían en que se pueda producir un repunte durante la temporada alta gracias a mercados potentes como es el caso del alemán -500.000 turistas germanos visitaron la Costa Blanca en 2008 y han desbancado a belgas y holandeses en El Altet-. Turismo acaba de participar en la feria Reisen de Hamburgo, pero la intención de los técnicos es reducir la presencia ferial e incidir más en acciones promocionales directas y ya se han programado actos individuales en Munich, Berlin y Frankfurt durante el mes de junio. Se van a organizar también los denominados viajes de familiarización de agentes de viajes y periodistas para que que conozcan los principales destinos y productos turísticos.

Turismo invertirá los fondos adicionales del plan de choque en la mejora de las infraestructuras turísticas de los municipios -17 millones-; en la ayuda las empresas -10 millones- y en el refuerzo de la promoción -8 millones-. Una parcela que también va a sufrir una fuerte restructuración en cuanto a la forma de organizar la campañas. Así, la consellera ha decidido reducir un 20% el presupuesto destinado a las ferias y apostará más por acudir a promociones directas en los mercados emisores de turistas con acciones directas en las ciudades.

Pese a que Benidorm tuvo en 2008 el mejor porcentaje de ocupación media (76%) de España, los empresarios del sector turístico de la Costa Blanca han comenzado a sentir en sus propias carnes las consecuencias de la crisis económica que afecta por igual a todos los segmentos del mercado, tanto el medio como el de lujo, según apuntan fuentes de la patronal. La fuerte caída del valor de la libra esterlina sobre el euro y la crisis económica que sacude también Gran Bretaña han provocado que la Costa Blanca pierda turismo británico por primera vez en diez años, algo impensable hasta ahora y que ha encendido todas las alarmas en el sector hotelero que atraviesa, además, uno de los inviernos más flojos de la década.

En cuanto al resurgir del mercado alemán, parte de culpa de que la Costa Blanca haya recuperado turismo alemán -no se producía algo similar desde finales de los 80- es la apuesta de la compañía aérea Air Berlin por El Altet -aeropuerto desde el que conecta semanalmente con 17 ciudades alemanas, bien de de forma directa o vía Palma-.

Air Berlin ofrece vuelos diarios y directos en invierno entre Alicante, Berlín, Dusseldorf, Frankfurt, Hamburgo y Münich, vehículo que han aprovechado los cuatro principales tour operadores independientes alemanes para montar una serie de paquetes turísticos -vuelo, hotel y coche para desplazamientos- gestionados por la minorista Sidetours, y reforzar la imagen de la Costa Blanca en Alemania. El resultado no se ha hecho esperar y varios hoteles de la provincia cuentan ya con clientes alemanes que han llegado, paradójicamente, desde la Costa de la Luz onubense y la malagueña Costa del Sol.

El perfil del turista alemán es el de una persona que viaja sola o en familia, huye de las grandes urbes y le gusta desplazarse durante sus vacaciones, de ahí que el paquete diseñado incluya el coche. Si bien el 33% de los germanos sale de vacaciones buscando el sol y la playa, un 27% se inclina por el turismo activo y de aventura.