La procesión de Stabab Mater , fundada hace 18 años, recuperó ayer la salida del trono desde el atrio de la iglesia de Nuestra Señora de Gracia que se había perdido en los últimos años. Los 148 costaleros sacaron este trono de madera maciza y 1.500 kilos de peso, con cinco imágenes obra del artista alicantino Remigio Soler en madera de pino Suecia policromada y más grande del tamaño natural con estilo colorista y mediterráneo. El trono, realzado con flores, lucía faroles de hierro forjado iluminando la escena a su paso, llamativa en los giros hacia las calles Ángel Lozano, Teatro y Castaños por sus grandes dimensiones. Salió con 42 costaleros nuevos del último curso del colegio Maristas, tradición en la hermandad. Alumnos del coro Musichetto cantaron en el recorrido y tocaron los niños de la banda del Cristo de la Caña, todos del centro, como numerosas damas de mantilla. Acabó en la Plaza del Ayuntamiento entre saetas, salve e himno nacional.