Los analistas de la Agencia Europea de Fronteras, Frontex, no han debido considerar preocupante que el pasado año se triplicara la llegada de pateras a la costa alicantina porque la provincia no ha sido incluida en un operativo internacional contra la inmigración irregular desde la costa argelina que se llevará a cabo durante cuatro meses en el litoral de Murcia y Almería. La denominada "operación Indalo" se realizará de junio a septiembre para prevenir la llegada al litoral español de pateras con inmigrantes procedentes de las costas del norte de África, preferentemente de Argelia. Esta operación viene realizándose desde 2007 en ambas provincias y también en Granada, aunque ésta última también ha sido excluida para el dispositivo de este año.
La oleada de dieciséis pateras interceptadas durante el pasado año en el litoral alicantino inducía a pensar que Frontex incluiría a Alicante por vez primera en el operativo internacional de vigilancia, pero no ha sido así y los controles tendrán que seguir realizándose con los cuatro radares del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) y con las dos patrulleras del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, aunque en esta unidad existen problemas de operatividad por el sistema de trabajo que ha impuesto el general jefe de la Comunidad Valenciana, quien da prioridad a la vigilancia en el interior de los puertos deportivos y no quiere que realicen jornadas de 24 horas, según ha denunciado en reiteradas ocasiones la Asociación Unificada de Guardias Civiles.
Desde la Subdelegación del Gobierno indicaron que la decisión del despliegue corresponde a la agencia Frontex y el hecho de excluir a Alicante responde a que en Murcia y Almería existe un riesgo más elevado de trasiego de pateras entre las costas de la península y las norteafricanas.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) no comparte la exclusión de la provincia en el operativo internacional y denuncia que "la costa alicantina es una zona caliente en materia de pateras y narcotráfico, pero no se toma en consideración".
De las dieciséis pateras descubiertas el pasado año en la costa alicantina, 101 inmigrantes fueron detenidos y aproximadamente otros 30 lograron su propósito de iniciar una nueva vida bien en España o en otro país europeo. Por contra, en 2008 fueron apresados 16 ocupantes de cinco pateras y otros 30 desembarcaron. El aumento es evidente y no sería descabellado que el litoral alicantino se incluyera en el dispositivo de vigilancia que se desplegará desde junio, pero aún así Frontex no debe considerar alarmante la situación en Alicante.
Medios
El operativo comporta la movilización de medios marítimos, aéreos y terrestres de varios países. En la del pasado año participaron nueve patrulleras, dos aviones de vigilancia marítima y dos helicópteros. Según la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, este dispositivo que se lleva a cabo desde hace tres años permite, además, obtener información que permite al Gobierno ser "cada vez más eficaz en la lucha contra las redes de traficantes" de personas.
Equipos policiales para obtener información estratégica y operativa
La Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional va a participar en la "operación Indalo" mediante "la obtención de inteligencia y el intercambio de información", según se recoge en un documento interno que ha sido remitido a todas las comisarías del país, incluida la de Alicante, para solicitar voluntarios que quieran participar en el dispositivo que coordinará la Agencia Europea de Fronteras durante los meses de verano. Dicha nota interna señala, además, que en la operación se formarán equipos para entrevistar a los inmigrantes recién llegados a las costas españolas con el fin "de obtener toda la información estratégica y operativa posible". Asimismo, se establecerá en Madrid un centro de coordinación de la "operación Indalo". La participación de los policías interesados en ir a la operación será de un mínimo de quince días y los agentes deben dominar preferiblemente el idioma francés para poder realizar en condiciones las entrevistas con los inmigrantes que sean detenidos durante los cuatro meses del dispositivo. En la operación del pasado año participaron efectivos de España, Italia, Francia, Bélgica, Alemania y Portugal y la vigilancia se desplegó en septiembre y octubre y durante el operativo fueron detenidos más de 500 inmigrantes que llegaron en patera, la mayoría de los cuales fueron repatriados a sus países de origen una vez fueron identificados. El coste del despliegue de medios de los países participantes en la "operación Indalo" lo financia en un 80% la Agencia Europea de Fronteras. P. C.
