El bombardeo del 25 de mayo de 1938 sobre el Mercado Central "formaba parte de la campaña de terror ordenada por las autoridades fascistas". Así lo señaló la alcaldesa, Sonia Castedo, durante el discurso que pronunció ayer en la colocación del nuevo nombre de la plaza del Mercado, que ha pasado a llamarse del "25 de Mayo" en memoria de los más de 300 muertos. En plena polémica por la negativa del Ayuntamiento de incluir la palabra "fascista" en la placa del memorial a los fallecidos, el que este término saliese de boca de la alcaldesa provocó el aplauso de un grupo de defensores de la memoria histórica que asistieron al acto. Pero pronto algunos se dieron cuenta de que el discurso coincidía, punto por punto, con el relato recogido por la wikipedia -una de las enciclopedias de internet-, y a partir de ahí dejaron de sorprenderse con sus palabras y se fueron adelantando al discurso, leyendo la enciclopedia a través del móvil.

Pero Castedo también hizo su aportación al agradecer al colectivo de Alicante Vivo su petición de cambiar el nombre de la plaza por el de "25 de Mayo". La regidora destacó que "la historia no se cambia porque no se puede, ni se quiere" y que las víctimas del trágico bombardeo "no tienen ideología y nosotros aquí tampoco".

Desde la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica y el Grupo Municipal Socialista dieron plantón al equipo de gobierno local del PP durante la inauguración al no estar de acuerdo con que junto a la designación de la nueva plaza como "25 de Mayo" no se instale una placa explicativa sobre lo ocurrido, en la que se ponga que fue obra "de la aviación fascista italiana". También piden que se incluya en la leyenda del futuro memorial a las víctimas. Sin embargo, desde el Ayuntamiento, aunque aseguran que habrá un monumento para homenajear a las víctimas y una placa explicativa bajo el nombre de la plaza, se oponen a incluir la palabra "fascista" porque, según la alcaldesa, "no queremos herir sensibilidades". Castedo señaló que "estamos trabajando para olvidar lo que no nos gusta" y resaltó que el homenaje es a las víctimas. En cuanto a su discurso, en el que no tuvo reparos en hablar de los fascistas italianos, Castedo incidió en que "la historia no se puede cambiar y siempre estará escrita". Reconoció haberla "leído tal cual" y aseveró que "hay cosas que es preferible olvidar y el homenaje es para las víctimas". La alcaldesa aseveró que "fue un bombardeo fascista, claro que lo fue, y lo sabemos, pero el homenaje es para quienes murieron y no queremos que haya ninguna influencia política que pueda enturbiar ese reconocimiento".

Estos mismos argumentos esgrimió cuando el secretario general de las Juventudes Socialistas, Antonio Mira Perceval, se dirigió a ella entre la multitud esgrimiendo que no entendía "su excusa de que se pueden herir sensibilidades". La discusión acabó con un apretón de manos entre ambos.

Por su parte, el edil de Cultura, Miguel Valor, aseguró que si no se llega a un acuerdo con la Comisión Cívica sobre el texto de la placa, el Ayuntamiento convocará un nuevo concurso de ideas para el memorial a las víctimas. Los reconocimientos a las víctimas se repiten desde el fin de semana por parte de varios colectivos, como la Comisión Cívica o Alicante Vivo, que hizo un homenaje a los fallecidos en el cementerio.