Uno de los grandes retos de la economía de la ciudad de Alicante es la mejora de la productividad de las empresas, "que crea riqueza y genera empleo", pero tal reto "solo es posible si entre todos los agentes sociales de la ciudad consiguen mitigar uno de los grandes problemas de Alicante: Los bajos niveles de cualificación". Esos bajos niveles se reflejan en que casi la mitad de la población no ha alcanzado el graduado escolar y sólo el 7,2 por ciento tiene formación universitaria. Así lo subraya el "diagnóstico" de Alicante, elaborado por la firma Deloitte, por encargo del Ayuntamiento, con el fin de que sirva de documento de base para elaborar entre todos los agentes sociales el plan estratégico de la ciudad.

El "diagnóstico" de la ciudad dedica un importante capítulo al nivel de educación de la población y señala al respecto que "la población de Alicante se caracteriza por presentar unos niveles de formación bajos, ya que el 42,2 por ciento no ha alcanzado el graduado escolar". Además, se destaca que el municipio está actualmente expuesto a una "importante fuga de capital humano". Así, se indica que sólo el 7,2 por ciento de los vecinos del término municipal presenta un nivel de formación universitario o superior. Un porcentaje que es tan excesivamente bajo, según el informe, para una ciudad que cuenta con Universidad, que revela un hecho "indudable", y es que "los jóvenes cualificados alicantinos se van de la ciudad buscando otras oportunidades de empleo". Esto explicaría tan reducida formación universitaria entre la población, cuando, según subraya el documento, la Universidad de Alicante contaba con 27.673 alumnos matriculados en estudios oficiales al 31 de diciembre del pasado año y además, casi tres mil alumnos estaban cursando másteres y tercer ciclo.

Universidad

Esta existencia de la Universidad es resaltada por el documento, que destaca los valores de la misma al indicar que "la Universidad es un potente agente de internacionalización de la ciudad gracias a su capacidad de atraer alumnos a nivel europeo". Igualmente se ensalza en el estudio la relevancia del campus "en algunas disciplinas a nivel nacional y cada vez más en el ámbito científico y de innovación".

Otros aspectos importantes relacionados con el bajo nivel de formación de los alicantinos son los referidos al "fracaso escolar", que el estudio de Deloitte califica como "uno de los grandes problemas en términos de educación", y lo ilustra señalando que "se estima que sólo el 55 por ciento de los alumnos terminan la ESO y un porcentaje aún menor, el 36 por ciento, accede al bachillerato", situación que "minora la capacidad competitiva de Alicante", señala el diagnóstico.

En sus conclusiones, el "diagnóstico" de la ciudad afirma que la "economía alicantina está basada en el sector servicios, especialmente en aquellas actividades relacionadas directamente con el sector turístico", pero advierte que el tejido empresarial muestra signos de estar tan anticuado "que no le permiten competir y diferenciarse de forma adecuada".

De cara al futuro, uno de los grandes retos de la ciudad, según el estudio, es "conseguir reconvertir su estructura productiva, impulsando el sector turístico a una diferenciación clara, para aumentar la calidad de los servicios ofrecidos y aprovechar los nuevos sectores emergentes, que son sin duda la gran oportunidad de la economía alicantina para aumentar su valor, ser más innovadora y más productiva".

Para ello el sustento fundamental, según el estudio, son el apoyo a las pymes y los emprendedores, que son los que "más capacidad tienen de generación de empleo". Pero todo ello no será posible con los actuales bajos niveles de formación y cualificación laboral, según el informe, y destaca que "la formación, la cualificación y la capacitación para el empleo son el camino a seguir si Alicante quiere competir en igualdad de condiciones con sus principales competidores". De este modo, concluye el informe Deloitte, "aumentar la cualificación del capital humano permitirá a las empresas de Alicante vender más y mejor, alcanzando los niveles necesarios de productividad".