Los ciudadanos rusos van camino de convertirse en los primeros inversores inmobiliarios extranjeros de la provincia, al haber adquirido este año el 40% de las 5.000 viviendas compradas por extranjeros en el primer semestre, lo que supuso un movimiento global de 800 millones de euros, según los datos que manejan lo promotores y la comercializadora Costa Activa, líder en la provincia. Los rusos se acercan cada día más a los británicos como principales demandantes foráneos de un vivienda en la Costa Blanca, y este año ha habido meses en los que, incluso, la ventas a rusos han superado a las de los ingleses.

Las 10.730 viviendas vendidas en 2011 a extranjeros situaron a la Comunidad como la autonomía líder en España en transacciones de inmuebles realizadas por ciudadanos de otras nacionalidades. Así, la Comunidad representa el 30,6% de las ventas de inmuebles a extranjeros de toda España, muy por delante de Andalucía, con el 19,2% y Cataluña, con el 14,9%. Alicante fue con diferencia la provincia con mayor número de transacciones, con más de 9.200, seguida de Málaga, 4.600 ventas, y Baleares, con 2.700 viviendas en 2011, según datos de la Conselleria de Infraestructuras

En estos momentos, y según explicaron ayer a este periódico fuentes de la colonia rusa y de la empresas especializadas en asesoramiento a los inversores, el perfil del comprador ruso es una persona que busca sol y playa y, sobre todo, casas con un precio medio en torno a los 150.000/200.000 euros. Los rusos ricos que adquieren viviendas por encima de los 600.000 euros existen, pero son los menos. A la hora de conseguir financiación, estos potenciales compradores chocan con los mismos problemas que el resto de los españoles, y de las personas no residentes en España.

Algo que los bancos justifican por el elevado aumento de la morosidad detectado en este colectivo de endeudados. Fuentes de las entidades financieras de la provincia apuntaron, en este sentido, que "no existe ningún tipo de discriminación. Las condiciones para la concesión de un crédito son las mismas que para cualquier no residente en España. Préstamos se dan pero claro que se está trabajando con más cautela porque la morosidad ha crecido más en este segmento de los clientes".

Apoyo del sector

La Asociación de Promotores Inmobiliarios de Alicante (Provia) defendió ayer la medida del Gobierno, que considera beneficiosa para la reactivación del sector y de toda la economía, aunque propuso un aumento de la inversión necesaria para obtener la residencia hasta los 500.000 euros frente a los 160.000 que baraja el Ejecutivo. De hecho, ésa era la propuesta inicial de los promotores, que han sido los principales impulsores de esta iniciativa a través de la Subdelegación del Gobierno, que ha ejercido de intermediaria en todo el proceso y con la que ayer mantuvieron una nueva reunión.

Fue Provia la que remitió a principios de este año un informe comparando las facilidades que se ofrecía a los inversores en otros países como Portugal, Australia, Chipre o Malta frente a las trabas que encontraban los compradores extracomunitarios en España y las oportunidades de negocio que se estaban desaprovechando. Al respecto, el planteamiento inicial de los promotores -que ayer reiteraron al Gobierno a través de su representante en la provincia, Alberto Martínez- era facilitar la residencia a los extranjeros que generasen empleo en España o bien que garantizasen una inversión mínima de 500.000 euros, de la que al menos 250.000 se destinase a la compra de una vivienda. El resto podría destinarse a deuda pública o a depósitos bancarios.

Desde Provia consideran que esta cifra se ajustaría mejor al perfil de clientes que se pretende captar y evitaría el posible efecto llamada u otros problemas que puede ocasionar un tope más bajo de 160.000 euros. Frente a las críticas que ha recibido la medida, los empresarios alicantinos defendieron que facilitar la residencia de estos inversores aportará una "gran cantidad de divisas muy necesaria para nuestro país".

Además, los promotores aseguran que, al dinamizar el sector inmobiliario, permitirá a la banca aligerar sus carteras, lo que se traducirá en más crédito para todo tipo de empresas y para los ciudadanos en general. Igualmente recuerdan los beneficios para industrias auxiliares como, por ejemplo, la del mueble.

Solo pueden disfrutar del inmueble 90 días cada seis meses

Otra de las quejas de la colonia de rusos que pasan temporadas en la Costa Blanca son las limitaciones que sigue poniendo el Gobierno a la estancia de los rusos en España. El propietario de una vivienda recibe sin problemas un permiso de residencia de 6 meses pero sólo puede disfrutar de su vivienda legalmente 90 días durante ese periodo. A los seis meses toca renovar documentos y vuelta a empezar. Un inglés disfruta de su casa todo el año.