­Juegan desde casa, en pijama y sin tener que poner cara de póquer, apuestan a ratos sueltos desde cualquier sitio o ven el partido del domingo con el ordenador al lado para intentar ganar unos euros adivinando quién marcará el siguiente gol. Son jugadores online y cada día son más: alrededor de un millón de personas en España, a tenor de las cifras que baraja el Ministerio de Hacienda que calcula que este año los españoles nos jugaremos 5.000 millones en apuestas a través de Internet. Todo un mundo que hasta el año pasado ni siquiera estaba regulado y que, tras la aprobación de la ley del juego online y la concesión de licencias a empresas operadoras, supondrá una recaudación fiscal de entre 150 y 160 millones de euros en este 2013.

En los juegos online, el póquer es el rey con el 40% de la facturación total de los juegos en Internet y que movió mil millones de euros en los primeros seis meses desde que se regularizó la actividad en junio del año pasado, seguido por las apuestas deportivas, el casino y el bingo, y su práctica va al alza. Así, según un estudio de Poker770.es, se espera que en 2013 el póquer en la red facture 2.500 millones de euros en España, lo que supone un aumento del 25% sobre el año pasado.

La expansión del juego llega al punto de que están surgiendo academias para aprender a jugar al póquer, tanto online como presencial. En Alicante, Pedro Martínez, antiguo crupier, abrió hace seis meses la tienda Maverik para jugadores en la que imparte cursos de póquer con bastante demanda, tal como ha señalado a este diario. Otro de los profesores de póquer de Alicante es Antonio Carrasco, cuya academia depende del casino Mediterráneo y que da clases de forma presencial y online. A su juicio, «con la publicidad que ha aumentado en los últimos tiempos desde la regulación, ha crecido el interés por el juego, tanto de gente que quiere aprender a jugar como de otros que pretenden dedicarse a esto de forma profesional y quieren perfeccionar su técnica». Carrasco destaca que entre sus clientes, «hay mucha gente joven menor de 35 años, muchos de ellos universitarios, porque el póquer requiere una formación matemática mínima y un análisis psicológico de los contrincantes».

Pese a lo que pueda parecer, ese análisis psicológico vital en una partida presencial en el que la actitud o el nerviosismo del de enfrente puede condicionar la partida, también es básico en el juego online y, de hecho, «por Internet hay programas que permiten hacer perfiles estadísticos de los jugadores con los que uno se enfrenta». Antonio Carrasco insiste en que hay que afrontar el juego online con responsabilidad gestionando bien el dinero, y alerta a aquellos que creen que así se puede obtener dinero rápido y fácil: «Dedicarse al póquer de forma profesional es un trabajo al que hay que dedicar sus 8 o 10 horas diarias y tomarlo muy en serio».

Adrenalina

Así de en serio se lo toman jugadores como Pedro Núñez de Cela, «Perico», asesor fiscal en Alicante y profesor de contabilidad que se autodefine como «semiprofesional» del juego, y eso que es de los pocos en España que está dado de alta en Hacienda como jugador de póquer. Perico prefiere el juego presencial, «relacionarte con la gente, notar cómo responde los otros... » pero considera que «jugar online es más cómodo, desde casa y además puedes jugar en varias mesas a la vez, es más rápido y tienes más posibilidades de ganar, aunque en un año en Internet puedes jugar todas las manos que jugarías de forma presencial durante toda la vida». Perico es uno de los fundadores en Alicante de la página pokerviu.com de información sobre el póquer tanto presencial como online en la que, entre otras cuestiones se insiste en la necesidad de abordar el juego de forma responsable. «El póquer provoca mucha adrenalina, muchos subidones y hay que aprender a jugar y a gestionar la banca. No te puedes meter en un torneo de 100 euros si tienes 200».

Otro de los jugadores habituales de póquer online de la provincia es Pablo Rojas, bombero de profesión, quien considera que muchos de los jugadores online no lo hacen por dinero. «Hay mucha gente que echa la partidita el domingo y se juega un euro y pasa la tarde mientras que otros se dejan una cantidad enorme de dinero. Por ejemplo yo conozco a un jugador que ganó 500.000 euros en un año y los perdió en una noche; hay que tener cuidado». Para Rojas, el póquer «es como un deporte de riesgo. Hay que practicarlo de forma segura y tener en cuenta tu capacidad. En el póquer lo importante no es el azar, es todo matemáticas». ¿Y cuánto se puede ganar? Pues depende, «igual ganas 2.000 euros en un mes que 500, o pierdes otro tanto», aunque son cifras alejadas de los grandes torneos mundiales con botes que llegan a 1 millón de euros, o en el caso de España a 50.000.

Apuestas deportivas

Otro de los sectores más activos es el de las apuestas deportivas que movieron 861 millones de euros de junio a noviembre. Además de la tradicional apuesta sobre el resultado de un encuentro, cada día proliferan más las apuestas en vivo mientras se está compitiendo a todos tipo de factores, desde quién va a ser el jugador en marcar un gol a cuántas paradas va a hacer un portero. Enriq Costa, uno de los gestores de la empresa alicantina Apuestasdeportivas.com con unos 20.000 usuarios, señala que «es unos de los ámbitos en los que menos se ha notado la crisis porque, aunque hay apuestas fuertes, la mayoría son apuestas de cincuenta céntimos a diez euros».

El fútbol es la actividad deportiva que más apuestas genera seguido del tenis y el baloncesto. Si en los juegos on line hay un porcentaje mayoritario de hombres, esta cifra se dispara en las apuestas deportivas. Así, tal como ha señalado Enriq Costa «hay una mujer por cada 54 hombres».

Según el Observatorio del Juego online en España dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, el perfil del jugador es hombre, en el 68% de los casos, de entre 25 y 44 años que trabaja y tiene estudios universitarios. Así lo refleja el observatorio tras la elaboración de una encuesta en la que se desprende que la categoría mayoritaria jugada online en 2012 se corresponde con las loterías y cupones, seguido de las apuestas deportivas. Sin embargo, el gasto mayor se produce en el póquer online y en el casino. Así, mientras que el gasto medio en loterías online es de 23,5 euros semanales, en el póquer esta cifra asciende a 51,2 euros. Este gasto, sin embargo, es muy dispar, sobre todo en el póquer donde el 20% de los jugadores mueve el 80% de la facturación.

El número de jugadores online en España ha aumentado desde que el 5 de junio de 2012 comenzaron las operaciones del mercado de juego online legal con la concesión de licencias a más de medio centenar de operadoras estimándose en la actualidad en un millón de personas en el país.

La aprobación de la ley de juego online en España no ha estado exenta de polémica al ser acogida con rechazo por parte de los jugadores, sobre todo los de póquer, debido a la tributación fiscal que dificulta compensar las pérdidas y las ganancias y que, según señalan, está ahuyentando fuera de España a los jugadores profesionales. Así, las empresas legales operan bajo un dominio .es y sólo en territorio español, lo que reduce el número de jugadores y la importancia de las partidas.

Las empresas tributan el 25% sobre la recaudación y los jugadores, por su parte, tienen que tributar por las ganancias pero encuentran dificultades en desgravarse las pérdidas, tal como ha señalado Pablo Rojas, quien considera que «aunque a partir de este año se pueden desgravar las pérdidas, a veces es muy difícil demostrarlas».

­Alertan del peligro del juego online entre los menores que apuestan a escondidas

La asociación alicantina contra la ludopaíta, Vída Libre, denuncia el "gran potencial adictivo" del juego en la red. Los padres de Jose, un joven alicantino de 16 años, están angustiados. Siempre ha sido un buen estudiante pero en los últimos tiempos empezó a suspender y repitió curso hasta que él mismo pidió ayuda a sus padres al ser incapaz de controlar el juego de póquer online y las apuestas deportivas que ocultaba y que le han ocasionado deudas que no puede pagar. Jose incluso ha admitido haber utilizado la tarjeta del padre para jugar simulando una identidad falsa. Éste es uno de los casos que se están tratando en la asociación alicantina de afectados por la ludopatía Vida Libre desde donde se alerta de un incremento de los casos de ludopatía de un 30% cada año.

Tal como ha señalado el psicólogo de la asociación Antonio Castaños, «la modalidad online que aúna la presencia de Internet de los jóvenes y el potencial adictivo del juego, a un clic del usuario, es responsable del incremento incesante de un nuevo tipo de afectado, cada vez más joven, tal y como observamos en nuestra tarea cotidiana». Así, el pasado año, la proporción de jugadores patológicos por apuestas online atendidos en Vida Libre prácticamente se triplicó respecto a años anteriores pasando de un 3% en 2008 a un 11% en 2011.

Castaños considera que la protección al menor contemplada en la ley «dista mucho de ser real» ya que, según asegura, «la mayoría de empresas de juego online no comprueban la edad del jugador mientras tengan una cuenta bancaria segura, por lo que hay menores que cogen la tarjeta del padre, dan el número y el propio casino virtual se encarga de ver el crédito sin exigir la clave personal».

Desde Vida Libre se cree que «sería fantástico que al menos parte de los beneficios de estas empresas se destinaran a la prevención de este grave trastorno, algo utópico frente al enorme potencial adictivo de esta modalidad de juego». A juicio de Castaños, la adicción del juego se incrementa en Internet porque facilita la disponibilidad ya que permite apostar incluso por el móvil, se vincula a actividades deportivas de masas como el fútbol o a juegos de moda entre los jóvenes como el póquer, hay mucha facilidad de acceso con disponibilidad las 24 horas y es rápido, anónimo y fácil de esconder para los adolescentes.