­Los trabajadores de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) preparan la puesta en marcha de la Línea 2 del tranvía entre Alicante y San Vicente del Raspeig para el próximo 9 de septiembre, día en que arrancarán las clases en la Universidad de Alicante. Así lo confirmó ayer el responsable de Transportes de CC OO, Vicente Alcaraz, quien indicó que ya está elaborado el cuadrante con los horarios y los turnos de trabajo para comenzar a operar la línea a partir de ese día.

Lo hará, según Alcaraz, con una frecuencia de paso de ocho minutos en las horas punta de entrada y salida de la Universidad -entre las 7 y las 8 de la mañana y las 13.30 y 15 horas-. Durante el resto del día, las frecuencias serán de en torno a 15 y 17 minutos.

Desde la Generalitat mostraron ayer su intención de poner en marcha la Línea 2 lo antes posible, antes del inicio del curso, si bien aseguraron que la fecha todavía no está cerrada a la espera de cuadrar las agendas para la inauguración. Pese a ello, los sindicatos sostienen que se han recibido indicaciones para comenzar a operar a partir del día 9. De hecho, señalan que se les han entregado ya los horarios y turnos de trabajo para empezar a funcionar ese día.

Frente al retraso en la puesta en marcha de la línea, Alcaraz se muestra satisfecho de que, finalmente, sean los trabajadores de la empresa pública de Ferrocarrils de la Generalitat quienes la operen. Algo que, según afirma, ha supuesto la paralización del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 70 personas. «Son 70 personas a las que no se va a despedir», remarcó. Desde FGV constataron que, con la entrada en funcionamiento de la Línea 2, la cifra de personas afectadas por el ERE se reducirá, si bien no concretaron la cifra.

Alcaraz mostró su preocupación por la reestructuración que pueda producirse en las líneas de autobuses urbanos por la puesta en marcha de la Línea 2 del tranvía, que unirá el centro de la ciudad con algunos de sus barrios, el Hospital General y la zona norte hasta llegar a San Vicente del Raspeig, con parada en la Universidad. «Esperamos que no haya recortes en las líneas de autobuses», incidió el representante sindical.

En concreto, la nueva línea de tranvía que unirá Alicante con San Vicente del Raspeig dispondrá de 14 paradas: Luceros, Mercado, Marq, La Goteta, Bulevar del Pla, Garbinet, Hospital, Maestro Alonso, Pintor Gastón Castelló, Virgen del Remedio, Ciudad Jardín, Santa Isabel, Universidad y San Vicente.

La puesta en marcha de la demandada Línea 2 se producirá más de dos años después de que la infraestructura esté terminada. Aunque en un principio iba a ser explotada por una empresa privada, finalmente serán los trabajadores de Ferrocarrils de la Generalitat quienes la gestionen. Durante el tiempo que ha permanecido sin uso, las arcas públicas han tenido que ir desembolsando 400.000 euros anuales para el mantenimiento de la línea. Una cantidad que se suma a la inversión de cien millones de euros que realizó la Generalitat para la construcción de la Línea 2 y los casi 50 millones que han costado los 14 tranvías que se adquirieron y que han permanecido guardados en las cocheras de El Campello.

Finalizan los dos meses de pruebas y la formación para más de cien trabajadores

Los preparativos para la puesta en marcha de la Línea 2 del tranvía comenzaron hace dos meses con las primeras pruebas de circulación de los comboyes y a primeros de julio arrancó el programa de formación para más de un centenar de trabajadores de la empresa pública, mayoritariamente maquinistas de las otras líneas así como reguladores del puesto de mando e interventores. El periodo de aprendizaje, con un global de 765 horas de instrucción a los trabajadores, culminará esta semana, fecha en la que también finalizan las pruebas de funcionamiento de los tranvías.

Durante el periodo previo a las pruebas, la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE) tuvo que reparar y reponer los elementos de electrificación y de la propia obra que habían sido objeto de actos vandálicos y robos durante el periodo que la línea ha permanecido sin funcionamiento. Después se realizaron pruebas de los sistemas de comunicaciones, señalización, semaforización y subestaciones para comprobar su funcionamiento, como explican desde FGV. Fuentes de la empresa pública añaden que también se instalaron los sistemas de comunicación y señalización con el puesto de mando de la estación de La Marina.

En estos dos últimos meses, las pruebas se han realizado día y noche. En estos días, se está comprobando el funcionamiento de las máquinas de billetes del interior de los tranvías. Los comboyes, compuestos por cinco vagones, tienen capacidad para 277 pasajeros. Pese a tratarse de tranvías nuevos, en los que se invirtió cerca de 50 millones, los trabajadores de FGV no han requerido un cursillo especial, puesto que son los mismos que se utilizan en las líneas 3 y 4 del TRAM.