Los tres partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Alicante pidieron ayer la retirada del monumento erigido en 2008 a la alcaldesa popular Sonia Castedo, quien hace diez días dimitió de su cargo a causa de su imputación en dos causas judiciales de presunta corrupción urbanística. El monumento, un bajo relieve con su rostro, descubierto por la propia Castedo el 8 de noviembre de 2008, está situado en la pedanía alicantina de Verdegás, con una placa que destaca la labor de Castedo al frente del departamento de Partidas Rurales, con las siguientes estrofas: «Valiente mujer naciste,/correcta tú te portaste,/luchando por Alicante,/entre todos destacaste/... Sonia Castedo amiga,/las partidas rurales te lo agradecen,/esto pasará a la historia,/a todos nos orgullece».

El portavoz de la ejecutiva local del PSOE, Lalo Díez, considera que un monumento a Castedo «queda lejos de lo que cualquier ciudadano quiere». En su opinión, la regidora del PP «no merece ni una calle ni una distinción parecida». Díez expresó su deseo de que el grupo municipal del PP se adhiera a la iniciativa que presentarán en pleno para que los imputados por supuestos delitos de corrupción no disfruten de honores.

Limpieza

El portavoz de EU, Miguel Ángel Pavón, dijo por su parte que la retirada sería «un gesto simbólico de la labor de limpieza que necesita el Ayuntamiento respecto a la herencia envenenada que ha dejado Castedo a la ciudad. Ese monumento no procede mantenerlo de ninguna manera», ya que fue promovido, según Pavón, por el alcalde pedáneo de Verdegás, del que apuntó que quería hacer «una loa a la jefa» para hacer supuestos méritos porque, según Pavón, desde entonces compatibiliza su puesto con el de asesor municipal. El concejal de UPyD, Fernando Llopis, piensa que ese monumento «no tiene demasiado sentido» porque se erigió «de manera alegre».

Castedo, llamada a declarar por el juez el día 16 de enero como imputada en la investigación de presuntas irregularidades del plan urbanístico de Rabasa, dimitió el pasado 23 de diciembre a través de un mensaje en la red social Facebook y formalizó tres días después, a través de un funcionario, su cese en el Registro municipal.

El lunes se celebra un pleno extraordinario para formalizar su dimisión, tras lo cual asumirá la Alcaldía por un periodo de diez días el vicealcalde, Andrés Llorens. El día 15 se celebrará otra sesión plenaria en la que el también popular Miguel Valor será elegido alcalde para lo que resta de legislatura.

Los grupos de la oposición coinciden en que la ausencia de Castedo en el pleno del lunes, en el que no se le espera, sería una desconsideración y un menosprecio a la ciudadanía. El portavoz del grupo municipal socialista, Miguel Ull, recordó ayer que «la alcaldesa se ha ido sin dar la cara. Es un menosprecio hacia la ciudadanía y hacia la oposición. Su obligación es ir al pleno y dar explicaciones. Lo contrario nos parece una cobardía».

Por su parte, Fernando Llopis, de UPyD, dijo que «lo razonable» es que hubiera dado explicaciones en persona a los ciudadanos sobre los motivos de su marcha. «Es una pena que quieran pasar de puntillas sobre el tema en un pleno. Le pido que recapacite y que acuda el lunes. Es, además, un desprecio a la oposición, a la que no se ha comunicado su renuncia y representamos a ciudadanos que no se lo merecen». Recordó que el lunes presentarán al pleno una propuesta para que la Alcaldía no pueda ser ocupada por personas procesadas, como el edil Andrés Llorens. «Lo más razonable es que hubieran acortado los plazos para que Miguel Valor fuera nombrado alcalde».