El Ayuntamiento de Alicante pretende endurecer las medidas contra los veladores que no cumplan la normativa municipal y estudia reducir su espacio en puntos concretos como la calle Castaños. Según anunció ayer a través de un comunicado el vicealcalde y concejal de Urbanismo y Vías Públicas, Miguel Ángel Pavón, el objetivo es hacer que las actividades de ocio y hostelería en el centro de la ciudad «sea compatible con el derecho de los vecinos al descanso y con la adecuada accesibilidad de las vías públicas». Por ello, anunció que se articularán diversos mecanismos «en el marco de la vigente ordenanza».

La concejalía de Urbanismo no autorizará a partir de ahora ningún nuevo velador «sin el preceptivo informe de la junta de distrito». Pavón afirmó que «se ha acabado» la política que practicaba el anterior equipo de gobierno de dar la licencia sin pasar por ese trámite, y ahora deberá incorporarse «lo que la asociación de vecinos afectada pueda considerar». En la resolución final, de la misma forma, se tendrán en cuenta «las consideraciones de la junta y de las asociaciones de vecinos afectadas». Asimismo, las juntas de distrito que tengan que informar de estas autorizaciones «se reunirán con una periodicidad mensual» para que el trámite del informe «no retrase en exceso las resoluciones».

El edil anunció un endurecimiento de las sanciones a los negocios por incumplimiento de la normativa, elevándose a una cuantía de hasta 3.000 euros en casos de reiteración o reincidencia de faltas muy graves. Además, se podrá suspender la actividad del negocio por un periodo que oscilará entre un mínimo de 15 días para faltas leves y un máximo de seis meses para faltas muy graves. Pavón recalcó que todas estas medidas «vienen recogidas en la vigente ordenanza» pero «jamás fueron aplicadas por el PP» mientras estuvo gobernando.

También se pretenden llevar a cabo, según indicó Pavón, «planes de ordenación para vías públicas saturadas de veladores», ya que, según dijo, zonas como la calle Castaños y su entorno «tienen una sobreocupación del espacio público que hay que corregir» con «planes específicos que la vigente ordenanza contempla y que el PP no quiso utilizar». El edil hizo hincapié en que el nuevo equipo de gobierno «tiene la voluntad política de resolver un conflicto que generó el PP autorizando veladores sin límite en determinados espacios de la ciudad». De esta forma, dejó entrever que se reducirá o limitará el espacio que actualmente ocupan las terrazas en estas vías. El responsable del área de Urbanismo insistió en el objetivo de que «el uso hostelero de la vía pública sea compatible con la accesibilidad de los espacios públicos y con el derecho al descanso de los vecinos».

Reunión con los empresarios

Pavón también mostró su intención de reunirse, a lo largo de este mismo mes, con miembros de las asociaciones de empresarios hosteleros APEHA y ALROA, que representan a los negocios que se ubican en el entorno de la calle Castaños. El concejal señaló que de esta forma seguiría la línea de la reunión con la Asociación de Vecinos del Centro Tradicional, a la que, agregó, trasladó las nuevas directrices sobre la ordenanza.

Por otra parte, en cuanto al comunicado que las citadas asociaciones han difundido exigiendo que se sea exhaustivo con las exigencias de conservación de inmuebles a los vecinos del centro, Pavón estimó que «no hay que confundir churras con merinas» y que el problema de sobreocupación de veladores de determinadas calles «hay que resolverlo» al margen de las medidas a adoptar «en materia de conservación de inmuebles».