«No hay quién esté con este calor, es inhumano para los enfermos». Un familiar de uno de los pacientes de la planta quinta del Hospital General, en neumología, resumía la situación que siguen soportando estos enfermos que, agobiados por la falta de suficiente refrigeración, optan en algunos caso por abrir la ventana porque se sienten agobiados.
Desde el Hospital achacan a esta medida, la apertura de las ventanas, el agravamiento de un sofoco que, en cualquier modo, admiten que no se ha podido solucionar del todo con la renovación del aire acondicionado: «La semana pasada se puso en marcha un nuevo sistema de climatización, con una capacidad de 700.000 frigorías, lo que ha permitido un aumento de la producción de frío y se continúa trabajando en el sistema de climatización para conseguir una mayor eficiencia», apreciaron los responsables del centro.
Delegados sindicales de CC OO que han llegado a medir temperaturas de 28 grados -a partir de 27 grados la normativa desaconseja la continuidad-, admiten que «algo ha mejorado» con la nueva refrigeración, pero añaden que en algunas plantas -como la cuarta, donde están los enfermos de digestivo, o la quinta, con los de neumología-, «resulta claramente insuficiente porque además se trata de servicios muy abiertos, en continuo movimiento para llevarles a rayos, por ejemplo, lo que dificulta la eficacia de la climatización».
También se ven perjudicados los pacientes de traumatología, en la sexta planta, pero hoy mismo está previsto su trasladado a la torre B para cerrar la C, que es la que concentra más el calor en todo el hospital.
