La Conselleria de Educación estudia la posibilidad de suprimir la exención de la enseñanza del valenciano en las zonas castellanoparlantes, como la Vega Baja, además de exigir el conocimiento de la lengua como requisito a los funcionarios de nuevo acceso.

El conseller, Vicent Marzà, destacó ayer que «el valenciano no es una circunvalación, sino una vía de comunicación con sus vecinos», por lo que el 20% del millón de euros que el Consell destinará a ayuntamientos para la promoción del valenciano, se reservará a municipios castellanoparlantes. También sostiene que «a los padres no les preguntamos si quieren que enseñemos matemáticas o no a sus hijos, porque es bueno para ellos, es una oportunidad, y el valenciano es una puerta más. Es un derecho que hemos de fomentar con toda la fuerza posible, para que se pueda disfrutar en todos el territorio sin discriminación».

El conseller recordó que se está elaborando un nuevo decreto de plurilingüismo y concretó que no habrá alumnos exentos del valenciano: «No queremos que nadie se quede fuera del acceso a ese derecho, no podemos negar a nadie esa oportunidad, queremos que las familias lo vean como una oportunidad».

Y es que Marzà apuntó que un 49% de la población de la Comunidad Valenciana no es capaz de hablar bien en valenciano (un 51,5% en 2010) y mientras 27,6% no lo entiende nada o casi nada. Los porcentajes aún son más altos en el caso de escribir y leer: el 65% de la población valenciana no es capaz de escribir en valenciano y el 47,1% tampoco lo es de leer.

Con todo, tres cuartas partes de la población mayor de 15 años declara entender bastante bien o perfectamente el valenciano (72,4%). Además, el 72,4% entiende bastante bien o perfectamente el valenciano; el 50,9% lo habla bastante bien o perfectamente; el 52,9% lo lee bastante bien o perfectamente, y el 34,7% lo escribe bastante bien o perfectamente.

Estos son algunos de los resultados de la encuesta «Coneixement i ús social del valencià 2015», que presentó ayer el conseller Vicent Marzà y el director general de Política Lingüística y Gestión del Multilingüismo, Rubén Trenzano. Este último señaló que, «en comparación con la anterior consulta, de 2010, el conocimiento de la lengua ha mejorado en algunos territorios, pero los usos han empeorado».

Respecto al inglés también reiteró el conseller que «sólo el 3% del profesorado está capacitado para dar una clase en inglés, no podemos hacer grandes promesas, como en el pasado», pero prometió un «nuevo y potente sistema de formación del profesorado».