El cambio de nombre de otro medio centenar de calles y espacios públicos estuvo sobre la mesa de la Concejalía de Memoria Histórica por sus vínculos con el franquismo, aunque finalmente no se incluyeron en la relación final que salió del área dirigida por María José Espuch (Compromís). Un listado que ahora tendrá que contar con el visto bueno de la comisión municipal de Memoria Histórica, cuyos miembros han tenido quince días para presentar alegaciones. La propuesta definitiva se someterá a votación del pleno y, una vez aprobada, será el área de Estadística la que comience con el cambio definitivo de las placas.
Entre las calles y espacios públicos que cambiarán su denominación para cumplir con la Ley de Memoria Histórica finalmente no estarán más de medio centenar de espacios -57, en concreto- que fueron sometidos a estudio por posibles vinculaciones con el franquismo. En el listado de «calles susceptibles de quitar» que partió de Memoria Histórica se recogen las vías propuestas para cambiar de nombre, las que se pretenden revisar y, también, las que se decidió «mantener». Entre estos últimos espacios, algunos de los más representativos de Alicante, como la Explanada de España o Luceros. Sobre la emblemática plaza, el texto explicativo que se incluye cuenta que es un «nombre de semblanza falangista para la republicana Plaza de Cataluña o antes Plaza de la Independencia». «Hace honor -continúa el párrafo de explicación- a una estrofa del Cara al Sol». Acerca de la Explanada, la frase resulta más vaga: «Antiguo malecón, sobre el que desde el siglo XIX se han acometido ampliaciones y mejoras hasta convertirse en este paseo, emblema de la ciudad».
También se estudió el cambio de calles como Alemania, por su «decisiva vinculación para el triunfo de los militares sublevados»; Italia, «por apoyar la sublevación de Franco» y porque «sus aviones bombardearon Alicante», o Portugal, por «el agradecimiento a los servicios que la dictadura de Salazar prestó a Franco». En el listado que salió de la Concejalía de Memoria Histórica se incluyen como propuestas para «mantener» calles vinculadas al cura Planelles, que «confesó a Primo de Rivera ante de morir fusilado»; al deportista Ramón Mendizábal, «jugador del Hércules y derechista fusilado en Córdoba», o al Maestro Alonso, «compositor de música popular y pasodobles de las Hogueras».
En el listado de espacios con posibles connotaciones franquistas, el departamento de Memoria Histórica también introdujo la calle Reyes Católicos, uno de los 57 espacios que la concejalía en manos de Compromís decide al final mantener en el futuro callejero de Alicante. «Durante su reinado se colonizó América. No es netamente franquista», concreta la explicación de una extensa relación que también incluye las calles Estella, Pinoso, Guardamar, Pío XII o Ejércitos Españoles, entre otras.
Desde Alicante Vivo aseguran que la inclusión de este medio centenar de calles en la lista de espacios con connotaciones franquistas era una «llamada de atención» sobre antiguas denominaciones. «Esos nombres sustituyeron entre 1939 y 1943 a calles que no fueron del agrado de la dictadura. Esas calles no iban a ser cambiadas bajo ningún concepto, se pretendía llamar la atención», aseguraron ayer desde la asociación cultura.
