Veinte meses va a tardar finalmente el Ayuntamiento de Alicante en reabrir el acuario de la plaza Nueva, que cerró a mediados de agosto de 2015 después de que muriesen los alrededor de 130 peces que estaban en su interior.

La Concejalía de Infraestructuras, a través de un comunicado, ha anunciado que el próximo jueves, 20 de abril, el alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri "inaugurará" un recinto cuya apertura estaba prevista en la agenda municipal para finales del pasado año, coincidiendo con la campaña de Navidad. La insistencia de los comerciantes de la zona, sin embargo, no tuvo los frutos que deseaban.

Tras las obras en la instalación que han tenido un coste aproximado de 120.000 euros, más de 200 ejemplares marinos, de unas 50 especies diferentes, podrán contemplarse a partir del próximo jueves. Según el comunicado, las actuaciones en el acuario han buscado "adecuar el interior de la edificación existente, con una nueva distribución de las urnas destinadas a albergar las distintas especies marinas". También se ha procedido, según explican desde Infraestructuras, "a la renovación del anterior sistema de refrigeración, al detectarse defectos, para mejorar la observación del interior, variar el contenido de las especies del acuario con mayor diversidad de ejemplares de diferentes entornos y promover la coordinación de programas de investigación y contenidos didácticos". La remodelación del acuario ha servido además para reparar "las motorizaciones de las persianas, sustituyendo los circuitos que no funcionaban, dotándolos de luminarias con lámparas de mayor eficiencia energética y capacidad de iluminación; sustituyendo los peldaños de la escalera de acceso al sótano".

Montaje

El proceso de puesta en marcha del acuario ha incluido el "montaje de la decoración con grietas y salientes que dejen espacio para que los peces puedan nadar y la constante comprobación de que los parámetros de calidad del agua han sido correctos para la introducción de los diferentes peces, comenzando por invertebrados y especies comedoras de algas, para ir incrementando lentamente el número de peces, siempre poco a poco para que superen el periodo de adaptación".

La polémica en torno al acuario surgió en agosto de 2015, cuando aparecieron muertos los alrededor de 130 peces que lo habitaban. Desde un primer momento, el futuro de la instalación enfrentó al PSOE, defendor del acuario, y a Guanyar, ya que la formación liderada por Miguel Ángel Pavón, junto a asociaciones animalistas y ecologistas, apostaba por un proyecto sin animales, con proyecciones en 3D.

Los problemas en la plaza Nueva continuaron unos días después, cuando el acuario amaneció lleno de pintadas anónimas en contra de la presencia de animales en su interior, es decir, en protesta por el proyecto defendido por el alcalde y al que se oponían desde Guanyar.

En marzo del pasado 2016, medio año después de que se cerrase el acuario por la muerte de los animales, el regidor socialista, Gabriel Echávarri, y la concejala de Infraestructuras, Gloria Vara, presentaron el anteproyecto de acondicionamiento del recinto de la plaza Nueva, que anunciaron iba a albergar especies del Mediterráneo. En esa intervención, la edil Vara predijo que el acuario abriría a finales del pasado año. Sin embargo, no será hasta el próximo jueves, veinte meses después de su cierre, cuando el acuario reabra.

En las últimas semanas, los responsables de la instalación empezaron a meter en el acuario las primeras especies en un proceso escalonado de aclimatación. Entre los animales que "estrenaron" el recinto remodelado estaban estrellas de mar, langostas, pintarrojas, llisas, cangrejos ermitaños, galateas y castañuelas. Más adelante también está previsto que se incluyan medusas, entre otras especies.