«Hemos detectado un repunte del machismo y de violencia de género sobre las jóvenes, el doble que el año pasado. No podemos limitarnos al cribado que llevamos a cabo en Atención Primaria». La técnica de Salud Pública, Ángela Escribano, presentó ayer ante los profesionales del Hospital General de Alicante los últimos resultados de las encuestas contra el maltrato llevadas a cabo en las consultas médicas de toda la Comunidad, y como conclusión animó a trabajar más encarecidamente en la prevención desde todos los ámbitos sociales «porque cuando nosotros lo detectamos, ya llegamos tarde», sentenció.

El cribado sanitario del mes de agosto de 2017, el último del que se tienen datos analizados en la Comunidad, sitúa precisamente al Hospital General de Alicante el primero en porcentaje de casos positivos de maltrato detectados tras la sospecha en la consulta o en los servicios de urgencias.

De las 73 pacientes encuestadas se confirmó violencia de género en un 19,18%, 14 de ellas, cuando la media del conjunto de hospitales es del 2,8%.

Escribano dio a conocer también un reciente mandato de la Conselleria de Sanidad para que se analicen los antecedentes de las cuatro mujeres asesinadas este año en la Comunidad, así como de las que tienen un pronóstico grave. «Debemos rastrear qué se nos ha escapado para prevenirlo y poder derivar los casos tras detectarlos», abundó.

Estudiantes

De su experiencia en los institutos de Secundaria, a los que acude a impartir charlas de concienciación entre los alumnos, esta profesional de la salud confiesa que sale «asustada» por las situaciones de «machismo y de violencia de género sobre las chicas jóvenes».

Lamenta que lo de la «media naranja» y «el mito del amor romántico» están a la orden del día entre los jóvenes estudiantes. «Lo primero que les digo a ellas es que no somos una media naranja y que si lo somos es porque alguien nos está exprimiendo. Y que 'no' es 'no', hasta con las bragas bajadas». Escribano alerta de que como sociedad «no estamos haciendo nada, y no podemos dejarlo en manos del médico tampoco. Somos diferentes pero no desiguales guales, y esta sigue siendo una sociedad machista», subrayó.

Por eso hizo hincapié en que el trabajo del profesional sanitario no debe limitarse a «hacer partes médicos», sino que desde cualquier consulta, ante la sospecha de un caso de maltrato, hay que llamar al 016 y denunciarlo. «Debemos ponerlas en manos de quien tiene los recursos especializados para que les ayuden», puntualizó.

Este ejercicio de cribado del maltrato en las consultas ha sacado ya a la luz 3.000 casos positivos de entre las más de 82.000 encuestas llevadas a cabo el último año en la Comunidad. «Hay que detectar las señales, porque muchas mujeres esperan que les digamos: 'creo que sé lo que te pasa, cuéntamelo para buscar una solución', destacó la técnica de salud.

Pero para eso hay que desarrollar en la consulta un sexto sentido porque hasta el 70% del maltrato detectado es psicológico, según se deriva del informe de los resultados. «Puede llamarnos la atención aunque parta de un dolor de garganta o de cabeza», advirtió. «Hablamos con la Policía o con la Fiscalía, no se trata de acumular informes médicos sino de derivar para poder recuperar a esa mujer».

Rastreo

Entre los datos aportados también significó que del rastreo de las 17 mujeres asesinadas en la provincia de Valencia entre 2012 y 2015, ninguna de ellas tenía un informe médico de presunta violencia, ni la más mínima sospecha. «¿Cómo es posible que nadie lo sospechara?», se preguntó alarmada.

Además advirtió de que no hay que dirigir a las potenciales víctimas al juzgado. «Preguntadas a pie de juzgado mujeres con sentencia, es significativo que las mujeres no se fían de los jueces, por eso hay llegar antes». Y la razón por la que las maltratadas confiesan que no dan el paso al juzgado es «por proteger a sus hijos».

Según datos del Ministerio de Interior, solo 8 mujeres denunciaron, de entre las 44 asesinadas el año pasado, y apenas 5 recibieron protección como medidas cautelares. «El juzgado es la segunda victimización tras la del maltratador, ellas no se atreven a ir y este año ya van 39 asesinadas», concluyó Escribano.