A principios de los años 70 el prestigioso arquitecto Fernando Higueras y el artista alicantino Eusebio Sempere se unieron en un proyecto para construir una iglesia en Onil, pero el templo nunca se llegó a levantar. Los planos se conservaron pero la maqueta desapareció tras la muerte del arquitecto madrileño. Ahora un grupo de nueve alumnos del máster de Arquitectura de la Universidad de Alicante han reproducido la maqueta utilizando los planos originales para cederla al Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA) que expone la obra de Sempere.

El responsable de la asignatura de Estructuras y subdirector de Arquitectura de la UA, Antonio Maciá, explicó que «gracias a una arquitecta que realizó su tesis sobre la obra de Higueras tenemos los planos y algunas fotografías con las que los alumnos han podido trabajar. En esta obra Sempere había diseñado las vidrieras y los grabados de la fachada por lo que al MACA le interesaba tenerla».

El arquitecto Santiago Varela, que también acudió ayer a la presentación de proyectos, destacó la obra de Higueras y señaló que quiso realizar una iglesia contemporánea con lo que en ese momento, en los años 70, se estaba construyendo. Concibió la iglesia con hormigón visto, material que utilizaba con frecuencia.

En la confección de la maqueta han participado nueve estudiantes: Pedro Pignatelli, Alba Vílchez, Juan Muñoz, María Juan, Natalia Moltó, Álvaro Bernabeu, Daniela Paunache, Ángel García y Aida Pérez. Y lo han hecho en modelo tridimensional gracias a una impresora 3D. El uso de esta herramienta ha ralentizado su trabajo y llegaron a la cita con un cuarto de maqueta, circunstancia que solventaron colocando dos espejos que permitían ver cómo quedará una vez finalizada.

Este trabajo es el final para la asignatura de Estructuras pero «tratamos de que todo lo que hacen los alumnos para cada asignatura del máster les sirva para el Proyecto de Fin de Máster, necesario para la habilitación profesional. Algunos incluso trabajarán sobre lo que presentan ahora de cara a ese proyecto», indicó el responsable del máster, Miguel Mesa del Castillo.

El resto de proyectos, todos ellos individuales, fueron desde una vivienda para un escritor en plena naturaleza hasta una casa para un diseñador de moda con un gran voladizo pasando por el lugar de trabajo para un modisto. Los alumnos pudieron elegir entre ubicar su proyecto en un solar en la ciudad, en un terreno abierto o en una manzana urbana pero sin medianeras y debían realizar una vivienda unifamiliar o un negocio que tuviera relación con la moda, la fotografía o el cine. Además de los profesores citados recibieron la crítica de un arquitecto holandés.

Por otra parte, dentro de los talleres de la Semana Internacional de la Arquitectura que se celebra estos días en la Escuela Politécnica Superior, cinco grupos de alumnos propondrá distintas alternativas para la zona trasera del castillo de Santa Bárbara.