Las Cortes han aprobado este martes introducir en el proyecto de la nueva Ley del Turismo, dentro de las modalidades de alojamiento turístico, que las viviendas de uso turístico son "apartamentos completos" y precisan de un informe municipal de compatibilidad urbanística que permita ese uso, es decir que los ayuntamientos tendrán la competencia para decidir que viviendas se puedan arrendar en cada edificio.

La comisión de Turismo ha debatido las enmiendas parciales al proyecto de ley de Turismo, ocio y hospitalidad de la Comunidad Valenciana, que sustituye a la ley aprobada hace diecisiete años, y que ha quedado listo para su votación en un próximo pleno. La ley contempla multas de hasta 600.000 euros (faltas muy graves) a los propietarios que alquilen sus viviendas como turísticas sin estar registradas.

Según el acuerdo de la comisión, las viviendas de uso turístico son "inmuebles completos" que cuentan con el informe municipal que permita ese uso y se cedan "mediante precio, con habitualidad, en condiciones de inmediata disponibilidad y con fines turísticos, vacacionales o de ocio".

Se considerará que existe habitualidad cuando el inmueble sea cedido para su uso turístico por empresas gestoras de viviendas turísticas, o sea puesto a disposición de los usuarios turísticos por sus propietarios o titulares, con independencia del tiempo contratado y siempre que se presten servicios propios de la industria hotelera. También se entenderá que existe habitualidad cuando se utilicen canales de comercialización turística, como operadores turísticos u otros canales de venta, incluido internet.

Sobre los planes de intervención, se ha establecido el estudio y posibilidad de aprobación de planes de intervención en ámbitos turísticos (PIAT). Estos planes pueden establecer la densidad global máxima de población, plazas de alojamiento totales, delimitar zonas y ámbitos turísticos y de protección, y fijar el tamaño y las características, así como establecer parámetros mínimos o máximos de superficie, volumetría, edificabilidad y equipamientos, y delimitar las zonas turísticas saturadas o maduras.

Los municipios podrán elaborar un plan de ordenación de los recursos turísticos (PORT), cuyo objeto es regular en el planeamiento, la ejecución y la gestión de los sistemas generales de las infraestructuras, los equipamientos, los servicios y las actividades de explotación de recursos en el ámbito de la ordenación turística, y cuyas conclusiones se incorporarán al Plan general de ordenación urbanística (PGOU).

Para el PSPV, la nueva ley de turismo es "oportuna, necesaria e innovadora". El diputado Vicente Arqués ha recordado que ya se han ganado dos contenciosos a plataformas digitales que hacen "un uso desleal" porque los apartamentos turísticos que publicitan no están registrados.

Para la diputada de Compromís , Teresa García, la ley hace de los pueblos y ciudades unos espacios "más hospitalarios e integradores para los visitantes y los propios ciudadanos", y ha apostado por que el turismo genere "turismofilia" y sea vertebrador de las ciudades.

Ciudadanos se ha abstenido en la votación del articulado de la ley por haberse tratado en la comisión muchas enmiendas "recién salidas del horno" y se pronunciará cuando se debata en el pleno, según ha explicado la diputada Rosa García.

Todos los grupos han acordado presentar una proposición no de ley para instar al Consell a regular los alojamientos singulares, según ha expuesto David Torres, de Podem.

El PP ha agradecido a los grupos que hayan "tendido puentes" para acercar posturas, pero ha asegurado que en la ley quedan cuestiones importantes "sin resolver", como el funcionamiento y la composición de los órganos de gobernanza y los apartamentos y viviendas turísticas, según Fernando Pastor.

Durante el debate, la red de colectivos vecinales Entre Barris ha colocado una fila de maletas en las puertas de Les Corts para mostrar su rechazo a la ley, al considerar que deja pasar la ocasión de regular "de forma sustantiva" los establecimientos turísticos.