En las comarcas alicantinas hay 87 tramos de carretera de un kilómetro de longitud donde se registraron al menos tres accidentes con víctimas en el año 2017, que se reparten exactamente en una proporción de dos tercios y uno, es decir, 58 y 29, entre la red de carreteras estatal y las vías que son titularidad de la Generalitat. Por su siniestralidad son técnicamente puntos negros, aunque no estén definidos de manera oficial como tales; de hecho, la Dirección General de Tráfico (DGT) no actualiza en su página web esa lista desde 2014. Tampoco todos están señalizados; sólo 12 tramos están identificados en las comarcas alicantinas como de concentración de accidentes.
En esos 87 puntos se produjeron en el año 2017 un total de 386 siniestros viales con víctimas, con el resultado de seis personas fallecidas, 22 con heridas graves y otras 585 lesionadas de carácter más leve, según los datos que han hecho públicos el Ministerio de Fomento y la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio sobre sus respectivas carreteras. Es decir, casi 400 accidentes y más de 600 víctimas en un solo año. Y además, la siniestralidad aumentó en relación a años anteriores: basta señalar que en los 58 puntos negros de la red viaria estatal en la provincia se registraron 260 accidentes en 2017, cuando en 2016 habían sido 155. Si vamos a las cifras globales de accidentalidad, el número de siniestros en las carreteras del Estado y de la Generalitat a su paso por esta demarcación fue de 1.003 (570 en una red y 433 en otra), con 29 fallecidos, 107 heridos graves y 1.535 heridos. En 2016, esas cifras fueron de 952 accidentes, 29 fallecidos, 90 heridos graves y 1.393 más leves.
El punto más conflictivo en las carreteras estatales es la rotonda de acceso a la Universidad de Alicante, con 20 accidentes a lo largo de 2017 que se saldaron con un herido grave y 24 leves. Asimismo, en la A-70 entre el acceso norte a Alicante y el enlace con la A-31 (12 km) se concentraron seis puntos conflictivos, con 24 accidentes y 41 heridos. Por su parte, en la variante de Torrevieja en la N-332 (5 km) hubo 39 accidentes con 78 heridos, y otros 15 siniestros con un fallecido y 29 heridos en 4 kilómetros de la misma vía en Santa Pola. Sin salir de la N-332 pero más al norte, entre La Vila Joiosa y la entrada a Altea hubo 37 accidentes con tres fallecidos y 48 heridos; en parte de esta zona se podía circular hasta ayer a un máximo de 100 km/hora. En cuanto a la red autonómica, sobresale la carretera Elche-Santa Pola; sólo en su arranque en Elche hubo 10 accidentes, con otros dos tramos peligrosos en sólo 11 km.
