Más de 200 donantes forman parte del Banco de Leche Materna de la Comunidad Valenciana captados por el Hospital General de Alicante en los dos últimos años, un dato "espectacular" que ha servido para alimentar a 226 niños ingresados en las unidades de cuidados intensivos (UCI) de la provincia.

Según un comunicado de la Consellería de Sanidad, en la Comunidad hay tres hospitales que reciben en estas donaciones: La Fe de València, el General de Castellón y el General alicantino, y éste último ha captado a un total de 205 donantes, "una respuesta espectacular por parte de las madres", en palabra de la coordinadora, la pediatra Verónica Escario.

El objetivo es alimentar a los recién nacidos y prematuros de mayor riesgo hospitalizados en las UCI neonatales de Alicante, Elche y Sant Joan d'Alacant.

Se trata de bebés menores de 32 semanas o de menos de un kilo y medio de peso, que tengan una patología digestiva o problemas de alimentación, como intolerancia a la leche de vaca, que hayan sido intervenidos, con hipoxia al nacimiento y que necesiten tratamiento con hipotermia activa, entre otros requisitos.

La leche materna es el mejor alimento para todos los lactantes y cuenta con los nutrientes óptimos para los recién nacidos prematuros o con ciertas enfermedades, por lo que "es importante iniciar de forma precoz la lactancia".

"Pero en esas circunstancias la madre sufre estrés y la subida de leche se retrasa, por lo que la donación es la mejor alternativa hasta que se dispone de la leche materna", ha explicado la coordinadora, quien ha recordado que este alimento "protege frente a enfermedades como la enterocolitis necrotizante, una patología grave en los recién nacidos".

Según Sanidad, muchas madres con hijos prematuros que han sido receptores han continuado después con esta cadena altruista de la donación "porque precisamente la filosofía del Banco de Leche es compartir y ayudar a estos niños que lo necesitan con un regalo para toda la vida".