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La ausencia de cuidados deteriora dos yacimientos arqueológicos en la Albufereta

La maleza y la basura invaden los restos romanos del Cerro de las Balsas y el Parque de las Naciones

El yacimiento arqueológico del Parque de las Naciones.

La falta de mantenimiento está deteriorando dos de los yacimientos arqueológicos más importantes de Alicante, ambos en la Albufereta, el íbero-romano del Cerro de las Balsas, y los restos situados en el Parque de las Naciones, una villa-necrópolis romana encerrada entre edificios, muy próxima a la antigua ciudad de Lucentum. La maleza oculta las ruinas y la basura se acumula en el fondo de las excavaciones del sitio del Parque de las Naciones mientras en el Cerro de las Balsas hay varios vertidos de escombros. El vandalismo ha hecho el resto: las vallas han sido forzadas y están en el suelo o rotas, lo que permite el libre acceso, y las lonas protectoras se encuentran destruidas. Hay piedras de las antiguas villas romanas con grafitis.

Estas ruinas están en el ostracismo al no desarrollarse hasta el momento ninguno de los proyectos previstos por el Ayuntamiento para transformar ambos espacios en parque arqueológico y museo al aire libre. Hace 20 años que se anunciaron las primeras actuaciones. «Es una pena. Está lleno de basura y de piedras sueltas», explica, señalando las latas y botellas que están al fondo de una excavación, Steve López, un vecino que conoce el sitio arqueológico del Parque de las Naciones desde que era pequeño y que ha visto acentuarse su degradación. «Es un yacimiento bastante grande pero no se ve nada porque la vegetación ha crecido mucho», apunta.

Aunque el Ayuntamiento cierra de vez en cuando las vallas, «la gente las reabre». Se ha convertido en una especie de parque vecinal donde las familias llevan a los niños y a pasear a los perros al encontrar inseguro el pipicán de avenida Locutor Vicente Hipólito, próximo a las vías del TRAM, desde que un can fue atropellado por el tranvía. Entre las ruinas hay una caseta de obra donde, explican los vecinos, se juntan pandillas que está completamente quemada.

En esta villa íbero-romana situada al lado de la avenida de Miriam Blasco, declarada Bien de Interés Cultural, se hallaron durante una excavación restos de seis tumbas de una necrópolis de la etapa altoimperial del imperio romano, así como estructuras de una zona urbana con habitaciones decoradas con frescos, un horno, un almacén, y múltiples fragmentos de recipientes y utensilios de cerámica. También una moneda de la época de Augusto. El Ayuntamiento anunció en 2010 la creación de un museo al aire libre al término de las excavaciones que entonces se realizaban pero el proyecto quedó paralizado. En la página web municipal se informa de que tiene 15.000 metros cuadrados y que apareció un horno de pan o de vidrio y un almacén. Restos de distintas épocas entre el siglo I antes de Cristo y el VI.

El Cerro de las Balsas (Tossal de les Basses), situado junto al Barranco del Juncaret, forma parte del sector 1/4 de la Albufereta, que incluía viviendas en torre y bungalows, lo que obligó a modificarlo para incluir un parque arqueológico conservando los restos, incluyendo los del poblado, declarado también Bien de Interés Cultural, y un entorno amplio de unos 15.000 metros cuadrados. En esa zona se hallaron dos hornos cerámicos de origen ibérico y más restos de la época romana.

Las obras del proyecto del plan parcial de la Albufereta, que incluía 1.500 viviendas, se iniciaron en 2008 tras 17 de años de paralización pero la empresa entró en concurso de acreedores y se quedó con las calles a medio urbanizar. Según explicaron desde el Ayuntamiento, el área de Urbanismo intenta reactivar el Cerro de las Balsas en conversaciones con los nuevos propietarios.

En este yacimiento hay al menos cuatro hornos en tierra y algunos de ellos están a cielo abierto, con riesgo de que se deterioren por las inclemencias meteorológicas, y de que alguien se caiga dentro. Hay otro más que fue extraído y que está protegido por un muro de hormigón, a la espera de que haga el parque arqueológico.

Aunque la zona en la que está es menos accesible que el área arqueológica del Parque de las Naciones, donde los restos de la villa romana pillan muy de paso, hay gente que entra también en el Cerro de las Balsas a verter escombros, actividad multada por la ordenanza de limpieza con cantidades hasta 3.000 euros. La valla próxima al barranco de la Albufereta está arrancada de su sitio y tumbada en el suelo, y en la zona robaron vallas y tapas de alcantarilla.

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