La pandemia de coronavirus ha provocado ya la muerte de 16 internos de la residencia de mayores DomusVi de Alcoy, donde se ha producido uno de los brotes más graves de la enfermedad hasta el momento en la Comunidad Valenciana. La Conselleria de Sanidad dio ayer a conocer este dato, y precisó que el geriátrico alcoyano concentra el 40% de los fallecimientos registrados hasta ahora a causa del Covid-19 en la provincia de Alicante, que ascienden a 40. Diez de ellos se produjeron el sábado, según explicó la titular del citado departamento autonómico, Ana Barceló.

En la mañana de ayer, cuando la consellera ofreció su comparecencia pública, había 58 afectados más por coronavirus en la provincia que el viernes, un total de 537. Uno de los nuevos casos positivos es un agente de la Policía Nacional en Alicante, informa Teresa Domínguez. En la Comunidad son 1.604 los contagiados y 69 los fallecidos. Barceló apuntó directamente al foco de la residencia de Alcoy como la causa de que la mortalidad esté siendo mayor en Alicante que en las otras dos provincias. El viernes se tenía constancia de que estaban contagiados 72 usuarios de ese centro y que 15 trabajadores habían enfermado o estaban en cuarentena.

José Luis García, portavoz de la plataforma que aglutina a los familiares de los internos del geriátrico, indicó que por parte del centro les han confirmado que «ya se han realizado las pruebas a todos los residentes y ya están llegando los resultados», y que en los próximos días les seguirán informando sobre el estado de sus allegados. No obstante, mostró su temor a que las pruebas que se hagan «queden obsoletas», ya que «están referidas a un momento determinado» y «hay enfermos que pueden haber dado negativo en el momento del test y presentar síntomas en días posteriores». Además, dijo, «el brote no está controlado y los presagios son completamente negativos».

En relación al personal, García señaló que, según el centro, «se han cubierto las bajas de los 15 profesionales afectados», y que «se están haciendo turnos de 12 horas», con periodos de descanso de entre dos y tres días para que «cuando estén en su horario de trabajo puedan afrontar la difícil situación de la mejor forma posible». Sobre posibles actuaciones por parte de la plataforma para pedir responsabilidades, el representante explicó que «ahora es complicado» por las circunstancias, pero que una vez pase la crisis «lo más probable» es que la plataforma se constituya formalmente y emprenda acciones.

La de Alcoy es la residencia más afectada por el coronavirus en la Comunidad, pero no la única. La consellera de Sanidad explicó ayer que en 24 geriátricos de la autonomía se ha producido al menos un caso de coronavirus, y que los usuarios afectados son 93, de los cuales han fallecido 23; es decir, un 75% de estos decesos han ocurrido en el centro alcoyano. Asimismo, un total de 51 trabajadores han contraído también la enfermedad, y otros 143 se encuentran en cuarentena.

El virus sigue extendiéndose entre los profesionales de la salud, tal y como explicó Barceló. A fecha de ayer eran ya 335 los trabajadores sanitarios que han dado positivo en la Comunidad -casi el 21% del total de personas infectadas-, 71 más que el sábado. Por su parte, las personas ingresadas en centros hospitalarios por la enfermedad son 590, de los cuales 209 están en la provincia de Alicante, y de éstos 33 en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Hasta la fecha se han producido 30 altas en la Comunidad y diez en la provincia, una más que el sábado.

Los hospitales de campaña estarán en diez días

La Conselleria crea un comité para coordinar todos los recursos de Cuidados Intensivos de la Comunidad

La Conselleria de Sanidad espera que los hospitales de campaña que se construirán en la Comunidad Valenciana para hacer frente a la pandemia del coronavirus estén terminados en un plazo aproximado de diez días, según aseveró ayer Ana Barceló. La consellera explicó en su comparecencia que «ya se están llevando a cabo trabajos de allanamiento del terreno y preparación», aunque sin detallar el grado de ejecución de esas obras en cada una de las tres capitales de provincia.

Estos tres hospitales se construirán en Alicante, València y Castelló, junto a centros sanitarios principales, de manera que, tal y como recordó Barceló, se puedan aprovechar los recursos de estas instalaciones. Tendrán en total 1.100 camas. En el caso específico alicantino, la dotación contará con 400 camas y se habilitará junto al Hospital General. Sin dar más detalles, la consellera señaló que en estos momentos se están «intentando salvar algunas cuestiones, pero irá en el mismo recinto» del centro sanitario de referencia de la ciudad.

Por otra parte, la responsable de Sanidad anunció que el sábado se constituyó un comité de coordinación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), con el objetivo de organizar todos los recursos de este tipo de la Comunidad, tanto de los hospitales públicos como de los privados, y que cuenta con la participación de la Sociedad Valenciana de Cuidados Intensivos. Con ello se pretende «tener una coordinación de las tres provincias» en la gestión de estos servicios. Acerca de la participación de la sanidad privada en la crisis, Barceló indicó que ya se están derivando pacientes a estos hospitales, «aunque no tengan que ver con el coronavirus».

Junto con esta medida, y a la vista de la gravedad del brote que se ha producido en un geriátrico de Alcoy, la consellera anunció que también se ha construido en cada departamento de salud de la Comunidad un comité para hacer un seguimiento diario de la evolución de las residencias de mayores de todo el territorio autonómico, «tengan o no casos positivos» de Covid-19. Estos comités están compuestos por el director de Atención Primaria o la gerencia, Salud Pública, Medicina Preventiva, Riesgos Laborales, la Unidad de Hospitalización a Domicilio y otros servicios de cada departamento. Con ellos, comentó, se quiere incidir en el control de esta población de elevado riesgo, y también velar por «que se cumplen las normas de riesgos laborales» en las instalaciones.

Asimismo, sobre los tests rápidos para detectar la enfermedad, se está «a la espera de que el Ministerio diga cuándo van a llegar». No obstante, según Barceló, en la Comunidad se dispondrá «de todos los que sean necesarios».