La familia Ruiz Igual de Crevillent ha hecho viral en las redes sociales una imagen de la Santa Faz alicantina proyectada sobre la torre campanario de la iglesia Nuestra Señora de Belén, principal templo de la villa. En muy pocos minutos, la fotografía recorría la provincia como reivindicación ante la negativa de las autoridades a que se realizara una sencilla bendición desde el Castillo de Santa Barbara a la población de Alicante. Así lo expone esta familia, que ya fue artífice de unir al pueblo crevillentino en una Semana Santa que tuvo en la fachada de la Parroquia Madre de Crevillent como enclave privilegiado. Septenario de los Dolores, Certamen de Bandas, Concierto Sacro y todas las procesiones, sin excepción alguna, en el horario habitual, fueron proyectadas en ologramas y acompañadas musicalmente con motetes, passarel·les, coros, dianas, tambores y bandas que son elementos tan autóctonos como valiosos, prueba de ello es la internacionalidad de la celebración crevillentina.

Ahora, esta familia crevillentina proyectaba sobre el campanario la Faz Divina recordando además que "la propuesta que las autoridades religiosas ofrecieron a las respectivas civiles permitía perfectamente cumplir -a la par- con la tradición religiosa y con la ley. Es inconcebible e incomprensible que por falta de espíritu conciliador de dirigentes políticos, el pueblo de Alicante y la comarca de l'Alacantí sientan la gran tristeza de no poder recibir la bendición de la Santa Faz desde el emblemático castillo".

Estos crevillentinos entienden que "si uno puede ir al supermercado, centro comercial, estanco, farmacia... ¿Por qué no puede acceder en un vehículo público o privado, si fuese necesario con una única persona, con la reliquia del rostro de Jesús, que tantos milagros cuenta en su haber, al lugar donde durante muchos siglos ha sido testigo de su gran Misericordia con los que a sus pies se citan? ¿De verdad, sería eso infringir la ley? Nosotros diríamos que es una obra de caridad y extrema necesidad ante la brutal crisis sanitaria que azota al mundo".

"Opino que no vivimos tiempos para andar sobrados de fe y menos para permitirnos el lujo de negar a quienes encuentran consuelo en tan inocuo gesto, la posibilidad de sentirse esperanzados y bendecidos por el lienzo que fuera portado por la Santa Mujer Verónica. Es tiempo de unir fuerzas, de pedir a Dios que ilumine la mente y el corazón de quienes nos gobiernan, velan por nuestra salud y nos protegen de males mayores. Pero mientras unos niegan permisos, otros hacen lo que pueden para seguir avivado la fe y la oración que sostiene, sosiega e ilumina a muchos, principalmente en tiempos recios como los que estamos viviendo. Muchas generaciones que nos han precedido han sido testigos de verdaderos milagros: ceses de pandemias, sequías, períodos tormentosos... En multitud de ocasiones que se ha invocado a la Santísima Faz Divina ".

Con este sencillo gesto, esta familia ha sido capaz de tejer redes y crear lazos fraternos y familiares en torno a la Santa Faz. Y, de nuevo, el gesto ha trascendido el ámbito local, ampliando su radio de acción a la comarca y provincia alicantina. Esperamos que este hecho haga replantearse decisiones injustas, poco fundadas y nada acertadas de quienes deberían preocuparse por crear unión y no disensión. Esperaremos la bendición para cuando nos lo permitan las circunstancias y los hombres. Y mientras tanto no nos olvidaremos de aclamar: SANTÍSIMA FAZ DIVINA, ¡MISERICORDIA!", finalizan su comunicado.