Ayer, la tromba de familias en la calle se vio aliviada por la tarde con una tremenda de agua en buena parte de la provincia. Y la mañana fue mucho más tranquila. Padres trabajando, niños en clases online... Pero los patentes incumplimientos del domingo, detectados en buena parte de los municipios alicantinos, pueden tener evidentes repercusiones con un repunte de la pandemia. Así lo advierten los facultativos que, aunque consideran que la mayoría de las familias cumplió razonablemente bien las normas, muchas otras no adoptaron las necesarias medidas de seguridad.
La presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria, María Ángeles Medina, era tajante ayer al decir que «desde el punto de vista de la prevención, que es el ámbito en el que trabajamos los centros de la salud, tememos que en una semana o diez días empiecen otra vez a repuntar los casos y, por bajar la guardia, esto sea una vuelta a empezar». En este sentido, el Dr. Antonio Redondo, pediatra del Hospital Vithas Medimar de Alicante, concreta: «No es un problema de multas. Es que, si seguimos así, el esfuerzo de estar recluidos seis semanas no va a servir para nada».
La Dra. Medina, médico de familia en un centro de salud ilicitano, destaca «la importancia que cada persona tenemos en la cadena. Si una pieza de la cadena cae, el resto va detrás». Así funciona la pandemia. En este sentido, el jefe delservicio de Pediatría del Hospital General Universitario de Elche, José Pastor, señala que «los niños son un vector muy importante de propagación de los virus y, aunque ellos no sufran síntomas graves -no tenemos constancia de ingresos en UCI en Alicante-, sí pueden contagiar a los adultos. De ahí que sea esencial el distanciamiento social también entre niños», apunta.
La mayoría de las familias cumplieron las medidas de seguridad establecidas. Así lo certifican las fuerzas de seguridad de la provincia que hasta ayer advirtieron o identificaron pero que hoy, advierten, comenzarán a sancionar con hasta 1.500 euros. Hay un porcentaje elevado de casos de incumplimientos que, en algunas situaciones, supusieron un verdadero caos. «Aunque la mayoría se comportó y pueden quedar en anécdota las situaciones peligrosas, si esa anécdota se multiplica nos vamos a encontrar con un problema serio, otras seis semanas en casa para lograr lo mismo que ya hemos conseguido», puntualiza Redondo. Este pediatra, junto al doctor Pastor, coinciden en exigir horarios distintos para pequeños y mayores a partir del próximo fin de semana, cuando está previsto que se permita el deporte y el paseo a todos los ciudadanos. «Es esencial que exista harmonía familiar y que los padres puedan pasear a sus hijos, pero no debemos caer en el error de juntar a pequeños y mayores en la calle», indica Pastor.
Virus circulante
«Y es fundamental que durante mucho tiempo todos los ciudadanos y en especial niños y mayores mantengan la distancia de seguridad de dos metros», añade Pastor. A esta medida hay que sumar la mascarilla y el lavado continuo de manos. «No hay que relajarse. La desescalada debe ser muy palautina. Todavía hay virus circulante y debemos ser muy cautos», asegura la Dra. Mar Masía, jefa del servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital General de Elche. «Hemos detectado que en personas aparentemente sanas, a las que estamos realizando la prueba porque se van a operar, dan positivo», remarca. Masía opina que «el descontrol de un día no sabemos qué consecuencias puede tener, pero el virus está circulando y todo puede ocurrir y se puede dar el repunte».
Para los médicos, un nuevo aumento de los casos sería un tremendo castigo. «Pensábamos que la sociedad había interiorizado la situación. Agradecemos los aplausos y la responsabilidad al no saturar las urgencias, pero las imágenes del domingo nos han apenado. El esfuerzo tiene que ser de todos. Apelamos a la responsabilidad personal y colectiva, Sentido común, por favor», concluye la Dra. María Ángeles Medina.
