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La provincia de Alicante inicia hoy la fase 0

La desescalada se inicia con dudas de las peluquerías y oposición de los bares. Alicante distribuye 574.000 mascarillas para el transporte público. Los restaurantes abren solo con pedidos para llevar.

Un salón de belleza se prepara para su reapertura. Áxel Álvarez

La fase 0 comienza hoy con ilusión, pero también con dudas en varios sectores como bares y peluquerías. Estos últimos, inundados de incertidumbre durante los últimos días, recibieron ayer por la tarde el boletín del BOE que despejaba algo sus dudas, pero que no termina de aclararlas todas.

Además, hoy también está prevista la apertura de restaurantes y cafeterías que puedan servir pedidos para llevar: estos deberán realizarse por teléfono o por internet. Será el turno también de comercios de hasta 400 metros cuadrados (ferreterías librerías, talleres...) con cita previa para la atención individual de clientes y se exigirá mantener la distancia mínima de dos metros.

Los establecimientos deberán desinfectarse dos veces al día y deberán tener dispensadores de gel hidroalcohólico. Los profesionales de fisioterapia, de centros de estética y de peluquería tendrán que llevar equipos de protección individual y garantizar la distancia mínima de dos metros entre clientes.

Por norma, las compras deberán hacerse en el mismo municipio en el que se reside, si bien se permitirá el traslado entre localidades pequeñas -no tienen por qué ser colindantes- en el caso de que no se puedan encontrar determinados productos.

En el sector de los peluqueros seguirán las normas del resto de comercios con algún matiz, como que deberán usar un peine por cada servicio. Además, si hubiera dos clientes a la vez, deberán estar separados por dos metros o una mampara, utensilio que la mayoría no dispone con tan poca antelación de aviso. El decreto avisa de que no se podrá ir a una peluquería que no esté en el municipio de residencia y la Asociación de Peluqueros de Alicante recomienda al cliente que pida la factura para no exponerse a una posible multa y para evitar también el intrusismo en la profesión.

Por su parte, más de 90 hosteleros de Santa Pola se oponen a las indicaciones del Gobierno central para la reapertura de hoteles, bares y restaurantes en los próximos días y han colgado un cartel de «se traspasa». Con ello se adhieren a la campaña nacional a la que recientemente también se sumaron locales de Elche avisando que muchos no abrirán por falta de rentabilidad en base a las indicaciones que marca el Estado en este plan de desescalada por la crisis del coronavirus.

Los hosteleros piden que se consensúen con el sector ciertas medidas como una flexibilización de los ERTE, bajada de impuestos, ampliación de terrazas al 50% o ayudas para el alquiler y una tarifa plana para las cotizaciones sociales durante el periodo de recuperación.

Por otra parte, Alicante destinará 574.000 mascarillas, de las que repartirá 238.000 en 56 nodos de transporte entre hoy y mañana. La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, indicó que «esta distribución tiene como objetivo garantizar el uso obligatorio de mascarilla en los transportes públicos colectivos».

Atención religiosa personalizada

Asimismo, la Iglesia se suma a la desescalada, aunque de manera más paulatina. En la fase 0, la actual, se mantiene el culto sin pueblo; es decir, la atención religiosa personalizada, especialmente a los enfermos, a los que han perdido a seres queridos, y la oración por los difuntos. En la fase 1, que si todo va bien será a partir del 11 de mayo, ya se permitirá la asistencia grupal, «pero no masiva», sin superar el tercio del aforo, con eucaristías dominicales y diarias.

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