La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública va a mantener la vigilancia sobre las residencias de mayores de la Comunidad Valenciana para detectar y controlar posibles brotes de coronavirus que puedan producirse, según han anunciado este sábado fuentes del departamento. Con la finalización del estado de alarma, la Conselleria pasa a ser la autoridad competente en materia sanitaria, por lo que a ella le corresponde adoptar las medidas oportunas para el control del covid-19. Por ello, se ha tomado la decisión de mantener el mismo protocolo de actuación aplicado hasta ahora, han señalado las mismas fuentes.

La resolución viene publicada este sábado en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV). Tal y como se indica en ella, las personas mayores, con discapacidad y otros usuarios de centros de servicios sociales de carácter residencial "se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad ante esta infección por su edad avanzada, patología de base o comorbilidades y convivencia en entornos cerrados, lo que les hace más frágiles ante las enfermedades". Por esta razón se hace necesario "el mantenimiento de medidas organizativas y de coordinación, orientadas a reducir el riesgo de contagio así como a tratar de la forma más adecuada a las personas que sufran esta enfermedad".

La Conselleria de Sanidad dictó el pasado 18 de marzo una resolución por la cual se acordaban medidas excepcionales en relación con las actuaciones sanitarias en las residencias de personas mayores dependientes, independientemente de su titularidad y tipología de gestión, en salvaguarda de la salud pública. A partir del cese del estado de alarma, añaden fuentes del departamento, se establecen medidas organizativas para seguir garantizando la prevención y control sanitario de la infección en los centros residenciales de servicios sociales.

El protocolo establece que estos centros de servicios sociales de carácter residencial seguirán siendo objeto de vigilancia y seguimiento respecto a la existencia y posible aparición de casos de covid-19, por parte de una comisión de control de estas instalaciones constituida en cada departamento de salud. Esta comisión será la que establezca y aplique todos los mecanismos necesarios para garantizar la prevención, detección, atención integral y control frente al coronavirus.

El órgano de control estará presidido por la Gerencia o la Dirección de Atención Primaria del departamento de Salud y formará parte del mismo personal con competencias en materia de salud pública, medicina preventiva, prevención de riesgos laborales, hospital a domicilio, inspección de servicios sanitarios y un representante de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, además de aquellos profesionales que considere necesarios incorporar la Gerencia. En los departamentos en régimen de concesión, como los de Dénia, Elche-Crevillent y Torrevieja en el caso de la provincia, debe formar también parte de ella el comisionado de la Conselleria.

Se siguen estableciendo tres grados de control de vigilancia sanitaria. El Grado 0 corresponde a centros sin ningún caso sospechoso o confirmado activo en residentes ni en trabajadores, e implica el seguimiento y control de que las medidas que se adoptan son las adecuadas y para detectar la aparición de posibles casos. Por su parte, el Grado 1 corresponde a centros con uno o más casos sospechosos o confirmados activos de covid-19 en residentes o trabajadores, que determina la declaración de brote por Salud Pública. Implica vigilar la evolución de los casos positivos y de la situación epidémica, y la adopción de las medidas de prevención y protección adecuadas, en colaboración con los recursos sanitarios y el servicio de prevención de riesgos laborales del centro residencial.

Por último, el Grado 2 incluye los centros con una evolución en gravedad de la situación epidémica en residentes o trabajadores, que determina, a criterio de la comisión de control de centros residenciales, la resolución de implementación de medidas para el control de la asistencia sanitaria del centro. Además se establecen otras medidas, como que los centros residenciales que a fecha 21 de junio estén en vigilancia activa de control sanitario Grado 1 y Grado 2 se mantenganen esta situación hasta el cierre del actual brote activo que justifica esa actuación, con las mismas medidas de protección y aislamiento.

Para cada centro residencial en vigilancia activa, la comisión de control designará un profesional empleado público como coordinador de la asistencia sanitaria que garantizará que se han adoptado las medidas establecidas sobre la ubicación y aislamiento en el centro, medidas higiénicas y de protección, coordinación para el diagnóstico, seguimiento y, en su caso, derivación sanitaria de los residentes.

Se indica también que aquellas resoluciones que puedan implicar el confinamiento en espacios cerrados y la limitación de derechos y libertades de las personas residentes deberán ser comunicadas a la autoridad judicial y a la fiscalía. La resolución publicada mantendrá su eficacia hasta que la situación sanitaria en relación con el brote epidémico permita su reconsideración, modificación o poner fin a la misma.