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CORONAVIRUS

Josep Ivars: «La recuperación turística llegará en 2023 y servirá para mejorar en la línea verde y digital»»

Cree que la crisis provocada por el covid-19 debe servir para «repensar» el modelo, huir de la masificación y mejorar la sostenibilidad y la digitalización

El profesor de la Universidad de Alicante Josep Ivars.

Nos enfrentamos a una temporada turística incierta por el temporada turísticacovid-19

El escenario es incierto pero el descenso puede ser de entre el 50 y el 80% dependiendo de los mercados. El mercado nacional se verá menos afectado que el internacional y, en la medida en que éste último tiene una aportación en términos de gasto superior, el impacto económico será elevado.

Los vuelos se empiezan a reactivar pero obviamente no van a alcanzar los niveles de años anteriores, ¿podrá el turismo nacional compensar al nacional en la turismo nacionalCosta Blanca

Esa compensación es imposible. De hecho, muchas empresas turísticas aún no han abierto y estamos en julio. Otras no van a abrir en toda la temporada. El turismo nacional está muy vinculado a los apartamentos y segundas residencias que será el grueso de la oferta que mejor va a funcionar, pero la demanda internacional en establecimientos hoteleros quedará muy por debajo de 2019.

«Esta crisis es una llamada a repensar el turismo masivo y donde mejor se gestiona es en destinos como los nuestros»

De hecho calculan que solo la mitad de los hoteles abrirá y hay dudas sobre si podrán hacerlo con aforo completo.

Es un contexto muy difícil. Estamos ante una situación inédita y la incertidumbre complica mucho la decisión empresarial, tanto en términos de apertura como de aforo y ajustes organizativos que tienen un coste para la empresa. Ante la atonía de la demanda, muchos empresarios optarán por no abrir.

En los aeropuertos toman la temperatura, pero al final no se ha implementado el «aeropuertos pasaporte sanitario

El pasaporte sanitario se ha debatido mucho y sería una mayor garantía para los movimientos seguros. Pero tampoco garantiza al 100% que no acceda a un país una persona contagiada y genera una selectividad en los desplazamientos difícil de gestionar. Estamos en una crisis tan complicada que las medidas sanitarias no acaban de satisfacer a nadie porque no son 100% seguras. Al mismo tiempo, esa apertura es necesaria para que la actividad turística no se desplome. Las medidas se podrían mejorar haciendo test PCR dos días antes de viajar pero es complicado de implementar. ¿Quién se hace cargo de los gastos? ¿Incrementa el coste del viaje? Si a eso sumamos la incertidumbre del desplazamiento y que en destino no se va a poder disfrutar igual que antes del covid se convierte en un factor de disuasión.

«El turismo es el sector más afectado. La Administración debe ser solidaria»

En las playas se han articulado distintos sistemas de control de aforo y vigilancia. ¿Están bien organizadas en general?

Las playas, según indican las autoridades sanitarias, no son un punto de contagio especialmente grave si se observan las medidas de seguridad. Veo un esfuerzo grande por parte de las administraciones local y autonómica para dotar de más personal para gestionar la afluencia y apoyos tecnológicos. Tenemos que apelar a la conciencia cívica de cada uno. Creo que se está gestionando razonablemente bien aunque es cierto que estamos en cifras más bajas de lo habitual excepto los fines de semana.

El turismo supone en 15% del PIB de la Comunidad Valenciana y el 20% en Alicante

Las previsiones de actividad económica son muy negativas, una caída histórica. ¿Cuándo vamos a recuperarnos a niveles pre covid? Yo creo que hay que realizar una reflexión. Depende de si hablamos del número de turistas, de niveles de gasto o de estacionalidad. La crisis tiene que servirnos para reconducir procesos turísticos que eran mejorables y, marcar la referencia en la cantidad, no es tan interesante como una recuperación inteligente de la actividad turística, que pasaría por afrontar temas como la sostenibilidad o incentivar segmentos que buscan la singularidad del destino y pueden ser más rentables. Es decir, hacer que la crisis contribuya a una transformación a mejor de un sector estratégico. Si hay que dar una fecha para la recuperación, yo creo que sería a partir de 2023. Vamos a ver el impacto en las compañías aéreas, en las grandes agencias de viajes online y cómo se van recuperando los países mediterráneos. Creo que la recuperación será más larga de lo esperado porque los mercados internacionales van a tardar más en recuperarse y los nacionales dependerán de la disponibilidad de renta. Y esto, si no se producen rebrotes de la pandemia

«El pasaporte sanitario ofrecería más garantías, pero también podía ser un factor disuasorio»

¿Hacia dónde va el turismo post covid?

De momento, a un repliegue a destinos de proximidad. En positivo redescubrir nuestra provincia, nuestra comunidad y nuestro país. El movimiento de personas es una gran conquista social, pero también entraña un riesgo para la salud, así que todo lo que tenga que ver con la seguridad en los desplazamientos va a ser muy importante. La reclusión en los hogares nos ha servido para que el entorno digital evolucione a velocidad de vértigo y eso también va a afectar a las maneras de reservar y de informarnos, que van a digitalizarse más. Algunos modelos de negocio, como el alojamiento a través de plataformas se van a ver afectados, ha habido fricciones con las cancelaciones y quizá algunos turistas prescindan de intermediarios en el futuro. Y la emergencia climática puede hacer que los viajes de larga distancia se contraigan. Habrá que ver el impacto en los precios, porque a mayor seguridad en los vuelos, mayor coste para el operador aéreo, que repercutirá al cliente. Vamos a ver la bajada de precios en temporada para captar clientes, pero por otra parte van a subir otros servicios. Los hoteles bajarán precios pero el precio de los vuelos subirá.

Los hoteleros llevan años intentando no tirar precios.

Un destino maduro como la Costa Blanca debe intentar competir en la relación calidad precio pero no en el precio bajo. La reacción de bajar precios de manera coyuntural no es la deseable, pero es comprensible.

Los empresarios han solicitado que se amplíen los ERTE

La capacidad financiera de resistencia en restauración y comercio es reducida. De ahí que sea importante que la administración les ayude. El turismo es ahora mismo el sector más afectado por la covid y necesita esos fondos de recuperación como en otros momentos lo requirió el sector industrial o el agrícola. Ahora la administración debe ser solidaria no sólo por las empresas sino por el empleo que generan. La Unión Europea tiene claro que el turismo tiene una importancia crucial, pero marca dos líneas clave, que la recuperación tiene que ser verde y digital. En Alicante y la Comunidad el sector es receptivo, ya estaba haciendo un esfuerzo grande en digitalización y la sostenibilidad tiene que ver con las empresas pero también con las políticas urbanísticas y ambientales de los ayuntamientos. Esta crisis es una llamada a repensar el turismo masivo y donde mejor se gestiona es en destinos como los nuestros, el mejor ejemplo es Benidorm. Densificar más las playas no es una tendencia razonable, interesa una contención para mejorar los destinos y la calidad para turistas y residentes. La tecnología, los destinos inteligentes, también van a ayudar mucho al conocimiento del cliente y a una mejor gestión para ganar competitividad.

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