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CORONAVIRUS

Alertan de una caída del 31% de recetas a enfermos crónicos por el covid

Evidencian las dificultades de los pacientes para acceder al sistema sanitario para renovar sus tratamientos y las repercusiones sobre su salud

Un paciente recoge sus medicinas en una farmacia durante la pandemia, en foto de archivo. efe

La pandemia de coronavirus y las dificultades de acceso al sistema sanitario van a pasar una importante factura sobre la salud de los enfermos crónicos. Así lo advierten desde el Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Alicante. Como ejemplo de la situación aportan un dato, la caída del 31% en las recetas que emitieron durante el mes de mayo las farmacias de la provincia de Alicante. Este descenso es superior al registrado en el conjunto del España y que fue del 10% durante el mes de mayo. En abril la caída de recetas en la provincia fue inferior, apenas del 3%.

«Pese a que lo peor de la pandemia ha pasado, los pacientes siguen teniendo muchas dificultades a la hora de contactar con su centro de salud. Llaman y llaman y nadie les coge el teléfono y otras veces cuando consiguen que les contesten tardan días en recibir la llamada de su médico», lamenta Fe Ballestero, presidenta del Colegio de Farmacia de Alicante. Renovar los tratamientos también está siendo complicado. «Se están produciendo muchos errores, por ejemplo, enfermos que aunque se les carga la medicación, ésta no está disponible hasta dentro de 15 días pese a que la necesitan ya». Una situación que, lamenta Ballestero, genera muchas quejas en las oficinas de farmacia, «cuando nosotros no podemos hacer nada».

En este sentido, la representante de los farmacéuticos lamenta que la situación sería más sencilla «si como llevamos pidiendo desde hace años nos hubieran incluido en el sistema de Atención Primaria». De esta forma, añade, «tendríamos acceso a la historia farmacoterapéutica del paciente y podríamos tener una comunicación con su médico de familia para solventar este tipo de problemas». Las farmacias «ahora ni siquiera tenemos acceso telefónico a los centros de salud, pese a que en la última versión del sistema de receta electrónica se da esta opción, pero nunca se llegó a poner en marcha».

Desde el Colegio de Farmacia de Valencia creen también que aunque la caída en el número de recetas del mes de mayo a priori parezcan datos excelentes, «este hecho a medio plazo provocará un incremento de los casos graves en este tipo de pacientes, generando un deterioro en su salud y, en consecuencia, un incremento del gasto sanitario para compensar esta situación».

La crisis del coronavirus ha obligado a cambiar totalmente la forma de trabajar de los centros de salud. Para evitar que muchas personas puedan coincidir en las salas de espera, los enfermos que necesitan ser vistos por su médico de familia deben contactar previamente por teléfono con su centro de salud para que su médico o enfermero les llame y decida si le atiende por teléfono o debe desplazarse al centro de salud. Aproximadamente un tercio de los pacientes está siendo citado de manera presencial, pero Sanidad quiere que esta cifra vaya aumentando paulatinamente.

El problema es que las centralitas de la mayor parte de los centros de salud están obsoletas y no dan abasto para atender tan elevado volumen de llamadas. Los pacientes se pasan días, en algunos casos, tratando de contactar con su centro de salud, por lo que al final acaban presentándose en el mismo, lo que genera grandes colas en la puerta.

La Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria ha pedido en reiteradas ocasiones a la Conselleria de Sanidad que ponga fin a esta situación con medidas como la de reforzar las centralitas telefónicas o que vuelva a estar operativa la app de cita previa para que al menos el enfermo pueda solicitar una consulta telefónica con su médico.

Semanas atrás el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, anunció que se dotaría a los centros de salud con cientos de webcams, teléfonos móviles y ordenadores portátiles para que pudieran hacer más teleconsultas, pero lo cierto es que la mayor parte de los centros de salud aún no han recibido este equipamiento.

Cuatro nuevos positivos en la provincia y un brote más por covid en Valencia

Alicante encadena siete días consecutivos sin que se hayan registrado nuevas muertes por coronavirus

La provincia de Alicante ha registrado cuatro nuevos casos de coronavirus de los 19 que se han notificado en la Comunidad Valenciana, 13 de ellos en la provincia de Valencia, donde además se ha registrado el único fallecido de la Comunidad Valenciana.

En las últimas horas se ha producido un nuevo brote de coronavirus en la Comunidad, concretamente en la localidad valenciana de Burjassot, donde se han declarado 6 casos positivos. Se trata de un brote único familiar y, según la Conselleria de Sanidad, se está realizando el seguimiento de contactos. Las pruebas que se han realizado hasta el momento han dado negativo.

Por otro lado, Salud Pública sigue realizando el estudio de contactos en el brote declarado en la ciudad de Castellón. Se han confirmado cuatro nuevos casos positivos que elevan a 31 el total de personas afectadas.

Respecto al brote de la empresa de Rafelbunyol, se continúan realizando pruebas PCR para descartar posibles casos en aquellos trabajadores que comparten zonas comunes con compañeros que ya han dado positivo.

La Comunidad Valenciana ha registrado en las últimas 24 horas un total de 74 altas a pacientes con coronavirus, por lo que el total de personas curadas asciende ya a 17.088 personas. Por provincias: 2.406 en Castellón, 5.717 en Alicante y 8.963 en Valencia, a los que hay sumar dos altas a desplazados. El número de personas ingresadas en los hospitales valencianos por coronavirus es de 54 pacientes, 6 de ellos en las Unidades de Cuidados Intensivos: 6 en la provincia de Castellón, sin pacientes en UCI; 19 en la provincia de Alicante, de ellos 4 en la UCI; y 29 en la provincia de Valencia, de ellos 2 en la UCI.

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