La federación Cocemfe Alicante de personas con discapacidad física y orgánica denuncia retrasos y falta de servicios en algunos puntos accesibles de las playas de la provincia de Alicante. Esta entidad, que agrupa a 45 asociaciones, entiende que se hayan reajustado los servicios debido a la situación excepcional derivada de la crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus, pero alegan que se está produciendo un excesivo retraso en la puesta en escena de esta zonas de estancia y baño, «además de servicios bajo mínimos, afectando a cientos de personas con movilidad reducida sin poder acceder al baño adaptado hasta principios y mediados de julio".
Por ello, reprochan que la realidad en estas áreas accesibles sea «dispar»y denuncian que en la mayoría no existe baño adaptado en el agua con asistentes encargados de estos puntos, si no que sólo pueden entrar al agua mediante la ayuda de los familiares mediante el préstamo de las sillas anfibias, tal y como ya expusieron algunos colectivos a INFORMACIÓN hace unas semanas.
Desde Cocemfe indican que en Alicante se inició el servicio ayer, sólo con horarios de mañanas y los usuarios sólo pueden entrar al agua con la asistencia de familiares, y mediante cita previa. En Benidorm los tres puntos accesibles están funcionando, dos en horario de mañana y tarde. Tanto en Dénia como en Santa Pola están abiertas las zonas adaptadas pero no asisten en el baño, solo ceden el material. En Torrevieja es obligatorio ir con un acompañante. En Xábia aún no se ha instalado el sistema de agua y luz para abrir el punto, según el colectivo.
En cuanto a la situación en Orihuela Costa, exponen que ni se ha abierto el área ni han podido contactar con la concejalía de Playas. Debido a estos horarios y estos retrasos en la mayoría de puntos de la provincia, la federación entiende que hay una discriminación al haber desventaja y agravio comparativo entre playas vecinas porque «parece que el verano para las personas con movilidad reducida en la provincia de Alicante, vuelve a comenzar más tarde que para el resto de ciudadanos y turistas porque si la apertura de las playas da comienzo el 15 de junio en años anteriores para las personas con movilidad reducida, lo hacía el 1 de julio». Ponen de ejemplo de buenas prácticas el caso de las playas de Barcelona donde el servicio ha comenzado en tiempo y forma.
Así las cosas, COCEMFE Alicante solicita a los ayuntamientos de la provincia de Alicante celeridad para que el colectivo de personas con discapacidad y,sobre todo,las personas con movilidad reducida puedan hacer uso y disfrute de las playas «en igualdad de condiciones que el resto de bañistas y por supuesto que esta situación no se vuelva a repetir en posteriores convocatorias, ya que suponen una reducción de los derechos de las personas con discapacidad», atajan.
La situación es compleja este verano para las personas con diversidad funcional o aquellas de avanzada edad que quieren entrar al agua. En el caso de usuarios con movilidad reducida y que son autónomos tendrán dificultades para poder bañarse, ya que la tendencia de los ayuntamientos y de los protocolos con los servicios en base a las recomendaciones sanitarias es que los trabajadores de estos puntos tengan menos responsabilidad, que se delega en los familiares o acompañantes de los usuarios, que son ellos los que tienen que hacer el esfuerzo de asistir a la persona en el agua mediante las sillas anfibias. Incluso hay usuarios que creen que se podrían haber buscado alternativas para que el personal de los puntos accesibles puedan hacer esta función, reforzándose, por ejemplo, los EPI's para que el contacto con los usuarios sea mínimo.
